Hienas con traje y corbata
El bochornoso espectáculo de las cosas que hemos oído en las conversaciones que han salido últimamente a la luz entre políticos del PP, por no nombrar otras muchas ya conocidas anteriormente, demuestra el verdadero objetivo de algunas personas que se dedican a la política. Esos rencores que se expresan con tanta claridad y tanta saña no parecen tener mucho que ver con algo de lo que suelen presumir siempre los políticos: su vocación de servidores públicos. Y debe ser verdad aquello de que están hechos de otra pasta. A cualquier ciudadano normal le daría vergüenza ir a comprar el pan si se hubiesen sabido de él las cosas que se han llegado a descubrir de muchos de nuestros políticos, pero ellos se pasean por la vida sin el menor pudor. Si lo que buscaban cuando se metieron en política era el lucro personal y la lucha más innoble por el poder, se podían haber quedado en casa. Habrían hecho un gran favor al país, aunque fuera por omisión.— Javier Rodríguez Almingol. Pamplona.