Fotografían a Pedro, exfutbolista del Barça, besando a una mujer y su esposa confirma el divorcio

El futbolista Pedro Rodríguez, exjugador del Barça y actualmente delantero del Chelsea, se ha convertido en noticia de los tabloides británicos al ser pillado por los paparazis besando a una mujer por la calle que no era su esposa. Al hacerse públicas las imágenes, Carolina Martín se ha visto obligada a confirmar el divorcio de la pareja en su cuenta de Instagram. “Con motivos de las últimas informaciones y rumores aparecidas acerca de mi relación con Pedro Rodríguez (jugador del Chelsea FC) me veo en la obligación de salir al paso de estas informaciones. Pedro y yo pusimos fin a nuestro matrimonio hace unos meses”, escribe en su cuenta, en la que tiene 29.200 seguidores.

Un mensaje en el que pide respeto por los tres hijos de la ya expareja, Bryan, Kyle y Marc, el pequeño de ellos nacido hace unas pocas semanas. “Le deseo lo mejor tanto en su vida profesional como personal”, termina Martín el mensaje que acompaña con una fotografía de sus tres hijos.

El jugador tinerfeño, de 30 años, fue fotografiado junto a una mujer por las calles de Londres el pasado jueves y el diario británico The Sun ha sido quien ha publicado las fotografías asegurando que la joven es la nueva pareja del futbolista. Unas imágenes que han sorprendido a muchos pues la hoy expareja, que se casó en 2015, dio la bienvenida a su tercer hijo a  primeros de julio. El nacimiento de su segundo hijo, en agosto de 2016, fue anunciada por Pedrito, como se conoce al futbolista, en su cuenta de Instagram, mientras su última paternidad la ha llevado de forma discreta sin hacer ningún tipo de anuncio. Su primer hijo nació en abril de 2013, antes de que la pareja se casara.

Pedro Rodríguez y Carolina Martín se casaron tras unos 10 años de relación en verano de 2015 en Cabrera de Mar (Barcelona) en una celebración a la que acudieron algunos de los entonces compañeros en el Barça del futbolista, como Xavi Hernández y Andrés Iniesta. Poco después de su enlace, se trasladaban a la capital británica tras el fichaje de Pedro por el Chelsea por unos 25 millones de euros.