_
_
_
_
Tentaciones
SIN FILTRO

¿Por qué nadie se inventa algo para que los hombres puedan llevar sus cosas sin parecer ridículos?

Riñoneras, mochilas saco, bolsos cruzados… Como cada año, el calor roba la dignidad a una gran parte de la población masculina

Llega el buen tiempo -en algunas ciudades nunca se ha ido- y con él regresan las agresiones estéticas en el atuendo de los hombres, fruto de la improvisación y torpeza masculina al tratar de adaptar su vestimenta al calor. El verano, esa época en la que los adultos llevan pantalón corto o incluso pesqueros y nos reímos de los guiris y su calcetín con sandalia mientras sudamos zapatillas con el pie desnudo o llevamos calcetinitos bajos que asoman solo un poco (de Crocs y derivados ya ni hablamos).

Pero vayamos a lo duro, al turrón: más allá de la mochila (garantía de espalda sudada) no existe una sola manera de que los hombres puedan llevar las cosas que no les caben en los bolsillos (cargador del móvil, gafas de sol, manojo de llaves…) y parecer personas respetables. Ninguna de las siguientes opciones que ya empiezan a florecer en nuestras calles lo consigue.

Riñonera - Si quieres parecer un adolescente, póntela cruzada. Si quieres parecer el feriante de los coches de choque, póntela en la cintura. Pero si no eres ni un adolescente ni un feriante no parecerás ninguna de esas dos cosas, solo un camello venido a menos o un señor que estaba en un camping y se ha desorientado.

Mochila saco - Las regalan en festivales, eventos y ferias de lo gratis. Son endebles y sin forma, con unas tiras que no llegan ni a la categoría de cuerdecita. Se abolla con cualquier objeto que deposites en su interior y hace que tu espalda parezca en un muro gigante adorado por una especie de bolsita de esas de llevar pepitas de oro en los cuentos.

Tote bag - La llaman así pero en realidad es la bolsa de tela de ir al súper sin contaminar el planeta. Sé que estáis pensando que esta alternativa es menos tremenda y no os falta razón, pero también es cierto que quienes la lucen en un sitio que no sea el súper parece que estén contando los días para asistir al FIB y rezando para que abran un Rough Trade en su pueblo.

Bolso cruzado o alforja - Es especialmente incómodo y marca las mamas. Es la evolución del zurrón de pastor o de repartidor de periódicos en las películas de gangsters. Recientemente hubo una plaga con el logo de Vespa de la que todavía no nos hemos recuperado.

Cartera de mano - Lo único bueno de este clásico complemento es que algunos lo llaman “mariconera”. Es como una cartera grande (frecuentemente regalo de agencia de viaje) que tiene todas las papeletas para acabar abandonada por descuido en la primera mesa o barra en la que la posas y que convierte al que la lleva en el protagonista de Cuéntame. Incluso aquel tubo de plástico para llevar monedas a la playa era más práctico.

Bandolera o bolso de hombre - No se puede caer más bajo. Especialmente cuando pretendes ser un tipo duro mientras la llevas.

Portadocumentos / portamóvil - Hola tengo un móvil del tamaño de un iPad y lo llevo colgando del cuello. Sí, es eso que ves en mi pecho y la funda es impermeable por si voy a la piscina, poder seguir con el móvil del tamaño de un iPad colgando del cuello pero en bañador.

Neceser de futbolista – Es ese estuche como para ir a hacer deporte. La versión holgada de la cartera de mano pero pensada para llevar las botas al entrenamiento con los del curro o al partido de soltero contra casados. Huele a gel de gimnasio.

Maletín – LOL

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_