En Vergelle (Italia) se levanta una antigua granja, una casa nórdica en la Toscana que esconde en su interior espacios diáfanos, revestimientos de madera...
La piscina está situada en la parte trasera de la finca,
junto a su frondoso jardín. Las tumbonas son de ratán,
y la cama redonda con capota, de Kettal.Raúl CandalesLa lámpara de pie y el sofá del salón son de Ikea;
el taburete que hace las veces de mesita y la silla
de mariposa fueron comprados en un mercadillo.
Raúl CandalesLa chimenea es un diseño personalizado de Rob Landeweerd y ocupa el espacio que comunica el comedor con la cocina, calentando ambas estancias en invierno.
Raúl CandalesEn la terraza exterior, con suelo de terracota, se ubica
un sofá de mimbre con cojines y mantas de Kardelen
The Lovely Linen Maker.
Raúl CandalesEl proyecto de la cocina es de obra del diseñador
Rob Landeweerd, que importó desde Holanda
la madera reciclada que forra la isla y la campana extractora. La encimera es de resina, la grifería
de Grohe y los taburetes Dyn de CLP.Raúl CandalesLa cama ha sido realizada por un artesano local.
Un taburete de madera comprado en un mercadillo
se ha convertido en mesita de noche. Sobre ella se sitúa
una lámpara blanca de Cult Furniture.
Raúl CandalesEl lavabo comunica las dos habitaciones de los niños.
La grifería es de Fantini, y el suelo, de tadelakt,
una superficie de yeso tratada mediante una técnica tradicional marroquí que lo hace impermeable.
Raúl CandalesLa carpintería exterior de la casa, junto a los porticones
de madera, ayuda a mantener una temperatura confortable en el interior a pesar de las altas temperaturas que se alcanzan en la región italiana de Siena en verano.
Raúl Candales
