Hijísimos

Papá no ha dejado todavía las maletas en la Casa Blanca y ya tenemos a la progenie hasta en la sopa. ¿Se acuerdan de Santa Zulemita de los Años Dorados del Menemismo? Pues se nos va a quedar en vulgar imitadora del pelo planchado de Ivanka. Si Melania permanece, tal y como amenaza, encastillada en la Trump Tower de Nueva York, cual versión serbia, bella y muda de la señora del Don Calogero Sedàra de El Gatopardo, para gozo de los fans de Lampedusa, Ivanka-Angelica lo tiene chupado. Se instala en Washington, se encasqueta el sombrerito pillbox de Jackie Kennedy y a elegir menús para las cenas de Estado a la vez que decide sobre política internacional según donde quiera ir de vacaciones.

¿Se imaginan la que se hubiera liado si Aznar hubiera puesto en la foto con Bush y Blair a sus tres vástagos? ¿O si los hijos de Hollande acompañaran a papá François a las cumbres del G8? Nadie ha visto el pelo a las hijas de Vladímir Putin. Una es profesora, y la otra compite en campeonatos de rock acrobático, sea lo que sea eso. Sin embargo, la semana pasada Eric, Don Jr. e Ivanka Trump fueron con papá al trabajo. A una reunión con, entre otros, el visionario Elon Musk, de Tesla, la superejecutiva Sheryl Sandberg, de Facebook, Jeff Bezos aka Mr. Amazon y Larry Page, el cofundador de Google. Los amos del mundo, los que de verdad mandan. La pregunta es, en esta cumbre de cumbres, ¿qué pintaban los tres hijos del líder del mundo libre?

Por cierto, cuando se busca en Google “líder del mundo libre”, sale una foto de Obama.