Entre los animales también rige un orden social, extraño, misterioso y gobernado por el instinto. Para retratarlo, el multipremiado fotógrafo polaco Tomasz Gudzowaty viajó desde las llanuras sin fin del parque tanzano de Serengueti hasta la desolación de la Antártida. Y su cámara se dejó fascinar por el espectáculo de la multitud animal.