Cosecha de agosto
¿Fue equilibrada la cobertura de los JJ.OO? Queja porque la ‘Revista de Agosto’ retomó textos publicados sin advertirlo
Agosto ha sido un mes intenso para los periodistas. A la inusual actividad política en España, se han sumado los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, que han exigido considerables energías. Si tengo que juzgar por los mensajes que se han acumulado en mi buzón durante ese mes, no me cabe duda de que los JJ.OO. han interesado mucho más que las especulaciones políticas.
Varios de estos correos coinciden en criticar que el periódico dedicara al triunfo de Carolina Marín en bádminton una pequeña careta en la portada de la edición del 20 de agosto. El espacio principal lo ocupó una fotografía del partido que enfrentó a las selecciones masculinas de baloncesto de España y Estados Unidos. Algunas lectoras se preguntan por qué no ha merecido la misma atención la selección femenina de baloncesto que ganó una medalla de plata y las deportistas, en general. El director adjunto, Jorge Rivera, no está de acuerdo con estas críticas. “Respetamos profundamente todas las opiniones, pero creo que el tratamiento de los triunfos de nuestras deportistas en los Juegos Olímpicos ha sido impecable”, señala. “De hecho, Mireia Belmonte o Ruth Beitia han sido protagonistas de nuestras portadas. En cualquier caso, nuestra apuesta sigue siendo prestar una singular atención al deporte femenino en España y a sus logros”.
En algunas de las numerosas crónicas de los Juegos se han filtrado, lamentablemente, errores. Un lector, Antonio Sánchez, me ha escrito para puntualizar que el primer medallista olímpico de la natación española no es, como se afirmaba en un texto del 14 de agosto, Sergi López, ganador de un bronce en Seúl. La primera medalla -bronce en 100 metros mariposa- la ganó David López Zubero ocho años antes, en los Juegos de Moscú (1980). También está en lo cierto Julio César Fernández Marín que me escribió sorprendido de que en una crónica del 19 de agosto se dijera que el volante del bádminton puede superar “los 130 kilómetros por segundo”. “¿Un proyectil impulsado por una raqueta que recorre en un segundo casi la distancia entre Córdoba y Sevilla?”, se pregunta. Imposible.
Este mismo lector detectó un fallo de más envergadura en el artículo de la serie Así se rodaron los clásicos incluida en la Revista de Agosto. En concreto, en el dedicado a la película Con faldas y a lo loco, del 22 de agosto. “Mientras lo leía”, escribe, “sentía una sensación de déjà vu, hasta que el párrafo final me confirma que eso ya lo he leído. Así que busco el DVD de esta película de la colección Cine de Oro que EL PAÍS lanzó hace unos años…y allí está. Se ha ajustado la longitud original a las necesidades de este artículo, pero el texto superviviente es el mismo, palabra por palabra, que el que se publicó junto al DVD. Nada que objetar, el autor es el mismo, pero ¿no es un poco raro publicar un refrito sin hacer referencia al artículo original?”
Era obligado advertir que la serie 'Así se rodaron los clásicos' procedía de textos publicados
Gregorio Belinchón, redactor de Cultura y autor de la serie (que ha incluido además entregas sobre Sed de mal, Dos hombres y un destino, y Ben-Hur), explica: “Efectivamente, el lector tiene razón: fueron libros de 8.000 a 10.000 palabras escritos por mí. A las cuatro entregas del reportaje les he recortado para que cupieran en el periódico (solo salen publicadas unas 1.000 palabras), actualizado datos (ha habido nueva película de Ben-Hur, por ejemplo) y leído algún material adicional sobre esos filmes (otro ejemplo: ha salido un nuevo libro de conversaciones con Orson Welles, unas charlas que nunca se habían escuchado antes y que vino bien para Sed de mal). En Con faldas y a lo loco hice labor de reedición y corrección de tiempos verbales, y no grandes cambios. Y el error fue no avisar al inicio de la serie que el material base ya había salido previamente publicado".
Nada que objetar a la publicación de esos textos en el diario, pero era obligado advertirlo.
Quiero recoger, por último la queja de dos lectores a propósito de la fotografía, tomada de un vídeo rodado en Siria, que ilustraba la información Aumentan las referencias a España en foros yihadistas, del 29 de agosto. El pie no aclaraba que el miliciano español que aparecía en ella junto a una bandera comunista y otra republicana, lejos de ser un yihadista, combatía contra el ISIS.
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