Gracias a organismos como Energía Sin Fronteras, Mensajeros de la Paz y al compromiso de los habitantes de Fo- Bouré, se implantó energía solar en el centro de salud y en la maternidad, además de instalar en las principales calles treinta y dos farolas autónomas que vierten luz de manera continuada unas 12 horas al día
Una de las primeras farolas fotovoltaicas de Fo-Bouré usada por estudiantes para estudiar por las noches.álvaro fuenteVarios estudiantes repasan la lección bajo una de las farolas. Antes se ayudaban de lámparas de queroseno o velas.álvaro fuenteLas horas del día se han alargado considerablemente y los pequeños puestos de comercio aprovechan la luz de las farolas hasta última hora.álvaro fuenteMama Rosse observa a su hija como prepara la comida en la antojana de su casa. Ahora solo utilizan la leña para cocinar.álvaro fuenteEn Fo-Bouré hay más seguridad para realizar vida social, trabajar en la calle o para que los niños puedan divertirse.álvaro fuenteReunión familiar en una casa del pueblo de Fo-Bouré bajo la luz de una bombilla.álvaro fuenteEl pequeño comercio se ha disparado en la comunidad. Las mujeres aprovechan para vender los productos que realizan o que sus maridos recolectan en el campo.álvaro fuenteUnos niños juegan frente a los 198 paneles fotovoltaicos instalados gracias a la iniciativa de las mujeres y de la Misión Católica de Fo-Bouré.álvaro fuenteJuan Pablo López, misionero de Fo-Bouré, posa ante los sistemas de control de la planta fotovoltaica.álvaro fuenteUn universitario da clases particulares a un grupo de alumnos en el salón de su casa.álvaro fuenteDenisse, nieta de Mama Rosse, repasa la lección bajo la única bombilla que tienen en su hogar.álvaro fuenteLa llegada de la luz ha permitido que se multiplique el acceso de la mujer al tejido laboral de la comunidad, sobre todo en cooperativas como las del karité.álvaro fuenteLa matrona riojana María Ángeles lleva de voluntaria varios meses en la misión. Acaba de atender un parto en la madrugada. Antes, se realizaba en la penumbra de las linternas o las lámparas de queroseno.álvaro fuente