_
_
_
_

De fiesta con Kendall Jenner y DiCaprio

Una cita de Chopard reúne en Cannes a parte del clan Kardashian, Kate Moss y Paris Hilton. Todos bailaron al ritmo de Diana Ross.

Kendall Jenner, en la fiesta de Chopard.
Kendall Jenner, en la fiesta de Chopard.David M. Benett (Dave Benett/Getty Images)

“I’m coming out! I want the world to know”, cantó Diana Ross. La diva de Motown apareció en mitad del escenario de la enorme carpa situada en el Port Cantó de Cannes, con un vestido azul eléctrico y una melena más asalvajada que nunca, como mandaba el dress code de la noche en la fiesta de Chopard que ella presidió con su música. Detrás de ella, una cascada de leds y un gran tigre creado a partir de luces rosas y naranjas miraba a todos los exclusivos invitados, que se movían entre plantas gigantes, como en una selva de lujo.

Leonardo DiCaprio, en el Hôtel du Cap-Eden-Roc, antes de ir a la fiesta.
Leonardo DiCaprio, en el Hôtel du Cap-Eden-Roc, antes de ir a la fiesta.Robino Salvatore (GC Images)

Wild Party se llamaba la tradicional fiesta anual que la marca de joyas Chopard, uno de los principales patrocinadores del Festival, diseñadores y creadores de su símbolo y premio, la Palma de Oro, organizó en la noche del lunes en el extremo opuesto de La Croisette al Palais des Festivals. En su invitación se exigía vestir “Wild chic” y Diana Ross lo interpretó con su melena rizada y su concierto de más de media hora. Pero el sarao había empezado antes de que ella apareciera en el escenario, cuando Kendall Jenner entró por el pasillo de espejos y neones.

Kate Moss, en la fiesta de las joyas.
Kate Moss, en la fiesta de las joyas.David M. Benett (Dave Benett/Getty Images)

Con un minivestido de plumas y transparencias blanco de Elie Saab, la supermodelo acaparó la atención de la fiesta, y solo le arrebató el protagonismo su madre, Kris Jenner, a quien se le acercaban más curiosos a pedir selfies. Siempre que su famoso guardaespaldas, Pascal Duvier, lo permitiera. Con ellas estaba también, Scott Disick, cuñado y yerno, marido de Kourtney Kardashian; y hasta su mesa se acercó a saludar Lottie Moss, la hermana de 18 años de Kate Moss, quien apareció más tarde en la fiesta, pero corrió hasta un rincón oscuro y cercano al escenario desde donde no perdió detalle del concierto de la líder de las Supreme.

Al otro lado de la pasarela, por la que desfilaron modelos vestidas de negro que dejaran brillar la colección de joyas de Chopard, junto a Kate Moss, también bailaba los éxitos de Diana Ross, Poppy Delevingne, con su melena larga platino y enfundada en un vestido de lentejuelas plateadas. Cerca andaban Adriana Lima, el ángel brasileño de Victoria’s Secret; la modelo rusa Daria Strokous, con un espectacular vestido blanco de espalda al descubierto; y la actriz Mischa Barton.

Kendall Jenner, en Cannes.
Kendall Jenner, en Cannes.Venturelli (Getty Images)

Con Upside Down y su versión ABC, de los Jackson 5, el público se subió a las banquetas a bailar. El actor francés Olivier Martinez saltaba con su grupo de amigos, cuando Paris Hilton, también con un vestido blanco, pasó apresurada entre ellos para llegar a los pies de Diana Ross. Solo un invitado permaneció entre las sombras, de incógnito, mientras duró el concierto: Leonardo DiCaprio. Con su eterna gorra para intentar taparse la cara, el actor intentaba esconderse mientras apuraba su cigarro electrónico. Animal nocturno, DiCaprio acude todos los años al Festival, pero apenas hace apariciones oficiales, viene atraído por sus fiestas y, probablemente, por las bellezas que le rodean.

Cantando I Will Survive, de Gloria Gaynor, Diana Ross se despidió a lo grande del evento, y tras su salida, desaparecieron a la carrera algunos invitados famosos. Kate Moss salió disparada, saludando brevemente a DiCaprio, quien siguió un rato hasta verse rodeado de modelos.

El DJ Mark Ronson fue el encargado de poner música al resto de la velada de lujo y luces de colores. Otra más en Cannes, el Festival por el que estrellas mundiales del cine han pasado desde hace 69 años para presentar sus películas, pasear sus alfombras rojas, descalzas o no, pero sobre todo, al que han venido y vienen por sus fiestas. Porque Cannes es una fiesta.

Lottie Moss, Oliver Cheshire y Pixie Lott, en la cita de Cannes
Lottie Moss, Oliver Cheshire y Pixie Lott, en la cita de CannesDavid M. Benett (Dave Benett/Getty Images)

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_