La chaqueta
¿Dónde está la famosa cazadora de piel amarilla de Zara?
Tanta periodista de tendencias y tanta tontería y llega un día, ese día, en el que una se da cuenta de que es una outsider. Porque de verdad que yo todavía no la he visto. Negras todas las que quieras, granate alguna, rosa la de mi jefa, azulonas, incluso. Pero ¿dónde está la famosa chaqueta de piel amarilla de Zara?
Estar, está por todas partes. En Twitter, en Facebook, en su propio Instagram (Inditex tiene que estar detrás, sino no me lo explico). Pero en la Gran Vía, en el metro, en los aeropuertos no hay, de verdad. El misterioso caso de la chaqueta omnipresente y desaparecida.
Es la moda. Está en todas partes y en ninguna. Es lo último, porque es de mañana y a la vez de ayer. La chaqueta está desaparecida, ya no sabemos si porque la tienen todas y no queda una en las tiendas o porque es tan popular que la han escondido en el armario para no cruzarse con siete más que la lleven puesta.
Ha venido, triunfara, se irá. Y volverá. Nos veremos con ella en 10 años, nos moriremos de vergüenza. Dentro de 15 nos hará gracia. Dentro de 20 nos maldeciremos a nosotros mismos por haberla tirado al contenedor.
No se rían. Es más fácil: desempolven sus álbumes, los que no tienen en el móvil, y mírense. Raya al centro (ajá), pantalones de campana (nos vamos acercando), camisetita ombliguera de terciopelo (ahora le llamaremos velvet crop top) y ¡ahí está! ¿Ven esa gargantilla negra feúcha? Dos décadas después se llama choker, la llevan todas las adolescentes y se vende en cada tienda y mercadillo. Y ya hay blogueras que dicen que ha pasado de moda. Como la chaqueta amarilla.
Nos vemos todas en 2030.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.