10 excentricidades que no le perdonaremos jamás a Prince
Un estilo extremo, poner en jaque a la industria musical o sus cambios de nombre son solo algunas de las historias atrevidas a lo largo de 40 años de carrera
La noticia de que Prince había aparecido muerto en el estudio de grabación de su rancho de Minnesota cogía por sorpresa a prensa especializada y a fans de uno de los artistas que mejores momentos ha dado a lo largo de sus casi 40 años de carrera. Muchos lo recordarán por sus romances, polémicos y cuestionados a partes iguales, otros por sus elecciones de vestuario, que hacían que sobre el escenario se vieran zapatos de plataforma 'disco' y su característico afro, algunos por su altivez y endiosamiento. Explicamos en varios puntos por qué se ha ido un mito y qué lo hacía único.
Prince se rio de los géneros vistiendo como una auténtica diva sobre el escenario
Sin que nadie jamás pusiera en entredicho la sexualidad de Prince, el cantante ha sido de los pocos que se ha atrevido a salir al escenario ataviado con pantalones de campana de lamé, monos dorados, plataformas más propias de la época disco y un afro que sólo menguó en los últimos años de su carrera. Muchos lo acusaron de ser más femenino que sus novias, y sí, esto era cierto. Y maravilloso.
Prince compuso uno de los mejores discos de la historia según la prensa especializada
En 1984 se ponía a la venta Purple Rain, uno de los discos que dio la vuelta hasta a lo que entonces se conocía como música negra. Junto a su banda, The Revolution, el cantante firmaba esta obra maestra que era, a su vez, la banda sonora de una película del mismo nombre, bastante innecesaria y aburrida que no le perdonaremos jamás, eso sí. La revista Rolling Stone fue de las primeras en incluirlo entre los mejores discos nunca lanzados.
Prince fastidió el negocio a discográficas y promotores de conciertos
Como recogía El País en un artículo de marzo de 2013, los últimos años de la carrera de Prince pasaron en moto de las convenciones de las discográficas y las promotoras de conciertos. Las multis cayeron en las trampas que al final hacían que los discos del artista se regalaran con periódicos y que montara los conciertos él solito tanto en estadios como en salas minúsculas. Teniendo una enorme fortuna, no hacía falta más.
Prince vivió la eterna contradicción de ser un testigo de Jehová hipersexualizado
En 2001 no tuvo ningún problema a la hora de transformarse en un testigo de Jehová. Lo que muchos simplemente vieron como una provocación él lo llevó a las últimas consecuencias después de veinte años de carrera llenos de referencias al sexo explícito y a las mujeres que pasaban por su cama. En ese momento se acabaron los tacos sobre el escenario y la carne en sus letras.
Prince fue nombrado la versión intelectual de Michael Jackson
Mientras que el reiterativamente llamado Rey del Pop, Michael Jackson, era aplaudido en los estadios de medio mundo, los seguidores de Prince siempre alegaban a su favor que el cantante además de poner la voz componía todos sus temas y se involucraba en la producción de todas las canciones. Eso es algo que siempre ha gustado mucho a la crítica. Seguro que ahora se ríen los dos de esta ficticia rivalidad estén donde estén.
Prince es el responsable de 'Nothing Compares 2 U'
La canción que hizo famosa Sinnead O'Connor es, en realidad, una versión de uno de los temas más acongojantes de Prince. La historia de la canción es tan sencilla como la vida. Se la dedicó a la hermana de una compañera de su banda Sussanah Melvoin, de la que estaba profundamente enamorado.
Prince se atrevió a desafiar las normas cambiándose el nombre por un signo
En una época en la que los artistas sin apellido como Prince o Madonna siempre fueron más respetados, el artista decidió que pasaba a llamarse con un inteligible signo sin correspondencia sonora. Los medios empezaron a llamarlo 'el artista anteriormente conocido como Prince' para evitar el engorro que suponía esa mezcla de cruz con letra gótica. Era 1993 y el cambio coincidió con el lanzamiento un año después del álbum 'Come'.
Prince fue una de las estrellas con más relaciones sentimentales por segundo
El poder de una estrella se conoce por los escándalos sexuales que la rodean, y en el caso de Prince las mujeres fueron parte indiscutible de su carrera. La relación que trascendió en mayor número de aspectos a la prensa fue la que mantuvo con Mayte García, una bailarina de danza del vientre de ascendencia puertorriqueña que desapareció del mapa tras un sonado divorcio, que la mantuvo en una situación más que privilegiada completamente alejada de los focos. Cuando se conocieron, ella tenía 16 años y él, 32. La española Paz Gómez apareció en el videoclip 'The most Beautiful girl in the world', previo concurso, y el cantante quedó prendado de esta chica. No, nunca la llegó a tocar, o eso es lo que ella reconoció.
Prince consiguió que la gente bajita se sintiera especial
"Mucho se habló durante la vida del artista de lo enorme de su ego y de cómo obligaba a muchos de sus empleados a llamarle 'mesías' o 'dios'. Sea la rumorología cierta o no la verdad es que el uso de tacones y alzas a lo largo de sus años de carrera estaba más que justificado pues Prince no pasaba del metro sesenta de estatura. Fue uno de los pocos artistas bajitos en conseguir rodear de glamour la falta de estatura.
Prince fue uno de los pioneros en hablar abiertamente sobre su lucha contra la depresión
Ahora es un tema que parece que deja de ser tabú gracias a las declaraciones de un montón de estrellas acerca de sus altibajos emocionales provocados por la depresión pero Prince fue un pionero en eso. Corría 1980, lanzaba 'Dirty Mind', y reconocía que no siempre los comienzos fueron sencillos. Ni siquiera para una megaestrella como él.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.