'Aquí mando yo' o por qué las señoras son las más divertidas viendo la tele

Antena 3 estrenó ayer por la noche Aquí mando yo, un novedoso formato de televisión en nuestro país basado en el inglés Gogglebox, que se emite en más de 20 países y que, básicamente, consiste en espiar a los telespectadores mientras ven la televisión. Vamos, un programa que podríamos tildar de 'metatelevisión': hacer televisión del hecho de que haya gente viéndola. ¿Suena complicado? Pues luego no lo es tanto.

Porque las 18 familias que participan en el programa, entre las que hay de todo, reaccionan de manera bastante parecida a cómo lo hacemos cualquiera de nosotros. Critican, lloran, se pelean unos con otros... ¡Como la vida misma! Y, sorprendentemente, tal naturalidad y un casting bastante acertado (sobre todo por las parejas de señoras con las que nos encantaría ver la televisión) funciona. A continuación, resumimos el programa en sus  siete puntos más destacados.

1- Ya empieza con polémica: Antena 3 ha desenterrado viejas rencillas del pasado. Si no recuerdan ustedes mal, Atresmedia y Mediaset han pasado varios años enfrentadas en los juzgados desde que se emitiera Sé lo que hicisteis. Telecinco denunció a La Sexta por emitir imágenes sin autorización y finalmente ganó la batalla. ¿El resultado? Antena 3 no emite en ninguno de sus programas nada de Telecinco. Aun así, se decidió a pedirles imágenes para Aquí mando yo.  "Entendemos la broma... Ya les hemos ganado algún juicio por cómo se han utilizado nuestras imágenes", contestaron desde la cadena de Fuencarral. Nos da bastante penita que  nunca vayan a comentar Sálvame, la verdad.

2- Emite programas de otras cadenas (y de actualidad):  Antena 3 sí ha conseguido imágenes de TVE o de National Geographic, entre otras cadenas, así que  los participantes pueden, por ejemplo, ver Masterchef. Gracias a ello, les pudimos ver reaccionar ante la 'bomba de sangre'. Por un lado, nos sorprende que una cadena privada no seleccione sólo programas propios y, por otro, nos llama la atención que el espacio comentado sea uno emitido esta misma semana. Muy bien.

3- Cocó  y Rosa: Son los grandes aciertos del casting del programa. Son madre e hija, viven en un caserío de Irún y parecen encantadoras en persona, pero viendo la tele son absolutamente despiadadas. Se ríen a mandíbula batiente los concursantes de Masterchef -“Ay que luego me da pena”, dicen después- y no se dejan engatusar por ese recurso de dar pena tan usado en los realities.  “A ver esto es un concurso de baile, no de pena”, sueltan cuando un concursante de Top Dance se echa a llorar. Y está claro que son vascas, vasquísimas. ¿Qué tienen encima de la mesa? Un  cuenco con un montón nueces y un martillo XXL. ¡Claro que sí!

4-Santi y Petri: Representan a la perfección a aquellas señoras a las que ver la tele les da absolutamente igual porque ellas lo que quieren es ponerse a hablar de sus cosas. A una de ellas le suena el móvil (con el tono de Paquito el chocolatero) y, ante las cámaras dice sin problema: “No tengo ganas de coger a quien me esta llamando esta tarde". Si ven un traje amarillo dicen: “ A mí me gusta mucho el amarillo”. O cuando ven a una concursante de Top Dance estirarse: "Nosotras en la gimnasia deberíamos hacer más cosas".  Y nos han dejado una de las mejores conversaciones del programa:

“- He engordado un montón yo.

- ¿Y antes que hacías?

- Comer menos”.

5- La pareja 'hipster': El casting de participantes parece abarcar lo máximo posible de la población española. Tanto que, por una vez, los 'hipster' (aunque es probable que ellos odien que les llamemos así) tienen una pequeña representación en una cadena generalista. La pareja formada por Borja y Natalia viven en Malasaña y tienen una casa extremadamente 'cuqui'. Porque no todas las familias viven en adosados a las afueras y ya era hora de que alguien lo dijera.

6- Los punkis: No nos creemos que todo el mundo vea la televisión con unos taquitos de queso y un vinito sobre la mesa del salón. Los únicos honrados con ello parecen ser los tres amigos punkis que, según leemos en la web de Antena 3, son integrantes del grupo Kaos Urbano. ¿Qué tienen encima de la mesa? Un par de birras. Nada de aperitivos perfectamente colocados. A estos sí que nos los creemos de verdad.

7- La brevedad del programa: Con un panorama televisivo en el que cuanto más tiempo ocupe en la parrilla más barato sale un programa, da gusto encontrarse un espacio que apenas dura 20 minutos. A pesar de la rareza del formato en nuestro país, en tan poco tiempo no da tiempo ni de cuestionárselo y podría ser la mejor manera de dejar a la audiencia con más ganas de que se emita la siguiente entrega. Sobre su éxito, nunca mejor dicho, la audiencia será la que lo decida.