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Kaláshnikov con filtro Valencia

Facebook e Instagram prohíben la venta de armas entre particulares Las redes sociales se estaban convirtiendo en el mayor mercado ilegal de estos productos

Enrique Alpañés

En diciembre de 2014, Brian E. Harleman pasó una noche en prisión acusado de violencia de género. No tenía una condena firme, pero sí antecedentes suficiente para no poder comprar armas de fuego. Pero los usuarios de Facebook no piden documentación para realizar estas transacciones, así que Harleman se conectó a la red social cuando salió del calabozo, compró una pistola y se dirigió al apartamento de su ex novia. Allí disparó y mató a su hija de diez años, disparó e hirió a su ex pareja y se suicidó.

Esta es una de las historias que ha recopilado la plataforma para el control de armas Everytown for Gun Safety y ha hecho llegar a los directivos de Facebook e Instagram, las redes sociales más populares del mundo. El resultado no se ha hecho esperar y en un comunicado, hecho público el viernes 29 de enero, la empresa de Mark Zuckerberg ha anunciado que prohibirá la compra venta de armas de fuego en sus redes sociales. Se mantendrán, no obstante, las páginas de armerías legales, pero la reciente política prohibirá la venta directa entre particulares, una transacción que, cabe destacar, no se completaba en la red social, sino físicamente.

Ni en la deep web, ni en los suburbios. La venta ilegal de armas se estaba produciendo delante de nuestras narices. Con más de 1.500 millones de usuarios, Facebook se ha convertido en uno de los mayores mercados de armas del mundo, según proclama el New York Times. Su compañía hermana, Instagram, es una opción menos masiva pero igual de efectiva. Este movimiento pretende acabar con su triste liderazgo.

El anuncio llega en un momento clave. Facebook ya prohibía la venta de marihuana, medicinas y drogas, incluso hace dos años, limitó la venta de armas, entre otras cosas exigiendo tener más de 18 años para realizarla. Esta medida coincidió con otros factores que han contrarrestado su efectividad. En los últimos dos años las ventas en esta red social se han multiplicado, como ha reconocido Monika Bickert, directora de política de producto de la compañía, en un comunicado.

De forma paralela, el presidente Barack Obama ha incidido en la necesidad de reforzar las leyes contra la venta ilegal de armas en los últimos meses, lo que ha hecho que muchos vendedores particulares se hayan volcado en las redes sociales para aprovecharse de este vacío legal.

El anuncio de Facebook e Instagram, por tanto, llega para frenar una tendencia no buscada. Muchos han visto en él una colaboración explícita con la administración Obama, pero más allá de movimientos partidistas parece querer poner fin a una alarma social, la de las muertes por armas de fuego, que se cobra tres víctimas a la hora en EE.UU.

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Sobre la firma

Enrique Alpañés
Licenciado en Derecho, máster en Periodismo. Ha pasado por las redacciones de la Cadena SER, Onda Cero, Vanity Fair y Yorokobu. En EL PAÍS escribe en la sección de Salud y Bienestar

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