Lecturas en el Metro
Para promover el hábito de leer en Brasil, país en el que de media solo se consumen 2 libros por habitante al año, la editorial de libros de bolsillo L&PM quiso sorprender a la población con una original idea: crear una colección de libros de bolsillo que además funcionara como billetes de metro.
Coincidiendo con el Día Mundial del Libro, el 23 de Abril, L&PM aprovechó para promocionar su iniciativa “Ticket Books” que consistió en repartir de manera gratuita un total de 10.000 ejemplares entre distintas estaciones del metro de la ciudad de São Paulo. Conjuntamente con la Agencia África, los editores crearon una colección de 10 libros que venían con tarjetas RFID (Radio-frequency identification) incrustadas en la parte trasera de la cubierta, que incluían 10 viajes gratuitos.
Estas tarjetas RFID ocultas hacen que los libros sean legibles por los escáneres que hay en los torniquetes como tarjetas de metro y puedan ser recargadas de nuevo, como si de un billete de metro se tratara.
La Agencia África también trabajó con ViaQuatro, la empresa que gestiona todo el sistema del Metro de São Paulo, para que los libros pudiesen estar disponibles de manera gratuita en distintos stands y ser repartidos por voluntarios en distintas estaciones.
La colección de libros de bolsillo incluía diez títulos:
1. Peanuts: Amistad. Para eso están los amigos de Charles M. Schulz
2. Garfield: Lo siento de Jim Davis
3. Cien sonetos de amor de Pablo Neruda
4. El Gran Gatsby de F. Scott Fitzgerald
5. El arte de la guerra de Sun Tzu
6. Sherlock Holmes: El sabueso de Baskerville de Sir Arthur Conan Doyle
7. Hamlet de William Shakespeare
8. Murder Alley de Agatha Christie
9. Chives In Trouble! de Mauricio de Sousa
10. Quintana Pocket de Mario Quintana.
Según datos de L&PM editores, más de 2.300 de los libros regalados han sido recargados de nuevo a través de la web de la editorial. Además, esta campaña de libros fue galardonada con tres trofeos en el Festival de Cannes Lions (2015) con el León de Plata en la categoría de Promoción, León de Plata en la categoría Outdoors (ejecuciones al aire libre) y un León de Bronce en la categoría de Diseño.
En Rumania, por ejemplo, particularmente en la ciudad de Cluj-Napoca (la segunda más poblada del país), surgió el año pasado una iniciativa donde los conductores de autobuses de la ciudad circulaban gratuitamente solo para aquellos usuarios que leían durante el trayecto. Una idea brillante que, a pesar de ser un experimento que duró cuatro días (Junio 2015), demostró que se puede promover de una manera diferente la lectura en los medios de transporte.
En el metro de Chicago, surgió otra iniciativa llamada “Books on the L” que consistía en transformar las estaciones y vagones del metro en bibliotecas, de tal manera que cualquier persona podía tomar prestado y devolver un libro de manera gratuita. Esta campaña animaba a los usuarios a interactuar con otros a través de las redes sociales para alertar donde se encontraban ciertos libros y títulos.
En España también ha habido intentos de promover la lectura en los medios de transporte. Hace poco más de 5 años, en Madrid se instaló la primera máquina dispensadora de préstamo de libros gratuitos, llamada Libroexpress, con 500 ejemplares de 80 títulos distintos. La máquina está instalada en el andén 1 (vía 1) de la estación de Sol de Renfe Cercanías.
Según el Centro de Investigación Sociológica (CIS), en España un 35% no lee nunca o casi nunca, dejando en concreto, una media de 8,6 libros al año, si se limita el cálculo solo a esos dos tercios del país que sí leen. En Finlandia, por citar uno de los países modélicos en este sentido, cada finlandés lee una media de 47 libros al año.
Aún falta mucho por hacer…
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