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CLAVES
Columna
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Memoria y recuerdos

Al cabo de los años, Blair y unos cuantos más de los que participaron en el dislate de la Guerra de Irak han pedido perdón por ello. Aznar no

Jorge M. Reverte

No estoy del todo seguro, pero creo que he localizado a la historiadora que acuñó la expresión “memoria histórica” (un día nos veremos las caras). Yo no tengo de eso, porque no suelo llevar bolígrafo ni libreta. Así que me conformo con los recuerdos. A buen seguro que es lo mismo que hace José María Aznar. Pero él le da solemnidad a lo que recuerda y parece que cuando se refiere a un hecho histórico jamás hay nada de banal en lo que recuerda.

Por ejemplo, para Aznar la decisión colectiva (Bush, Blair y él mismo) de invadir Irak fue muy positiva para España. La valoración tiene algún punto como para estudiar. En primer lugar, algo que también comparte Esperanza Aguirre: España intervino en la guerra de Irak sin poner un solo soldado. Y Aznar, después de decir eso aclara: si teníamos un socio, había que tomar los mismos riesgos. Es verdad, pero España no envió ni un soldado, y se mostró como un socio nada fiable. Primera chapuza de la valoración: no hemos podido salir beneficiados porque hemos engañado a nuestros aliados (por lo menos a Bush y a Blair). Aznar ha quedado bien con Podemos, pero no con Blair ni Bush. Ha hecho una virguería, yendo a una guerra sin ir, y llenando un país de bombas sin tirarlas.

Lo demás pertenece al área de las valoraciones. Aznar ha quedado muy bien con su tono enfático, y los españoles de la misma manera porque era nuestro presidente. Y Aznar, al que le pasa por lo visto lo que a mi, se le aparece un recuerdo, un chispazo según el cual Bush y Blair le miraban asombrados por su gesto sereno y ajeno al peligro. Ese recuerdo tiene Aznar de aquella chapuza que condenó a muerte a cientos de miles de personas y dio muchos motivos para subir el sueldo a miles de militares.

Al cabo de los años Blair y unos cuantos más de los que participaron en el dislate han pedido perdón por ello. Aznar no, Aznar se reafirma en la justeza del acuerdo. Que su dios se lo premie.

(Quiero pedir disculpas a Pablo Iglesias por haberle llamado ignorante sin dar una sola prueba. Que mi dios me lo castigue. Esto queda para la memoria y la profesora.)

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