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Porque lo digo yo
Columna
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Demasiado ‘relaxing’

No es poco, pero si llamamos debate al encuentro entre Iglesias y Rivera es que andamos perdidos

Elvira Lindo

Escribir una columna sobre el encuentro, no debate, de Iglesias y Rivera en un bar de Barcelona, por más que la jauría tuitera se empeñe, no puede despertar apasionadas reacciones: el anunciadísimo encuentro de los dos titanes, triunfante desde luego en el ranking de audiencias, no cabe juzgarse sino como una audacia televisiva consistente en convocar a dos rivales de la nueva hornada para que den una lección de buenos modales a la vieja escuela. No es poco, pero si llamamos debate a esto es que andamos perdidos. ¿O es que los votantes, reconvertidos ya para siempre en audiencia, no quieren ver a los candidatos exponer sus ideas, con cifras y datos que prueben que aquello que proponen está dentro de lo posible y no se mueve sólo en el terreno de lo especulativo y emocional?

Debido a la inaceptable intromisión de la clase política en la televisión pública, que es quien debería favorecer vibrantes debates, hemos decidido conformarnos con unas nuevas reglas encaminadas más a alegrar a la audiencia que a favorecer una visión compleja del momento político. Al término de la charla entre Iglesias y Rivera, Alberto Garzón se preguntaba por qué no había sido invitado él a dicho encuentro. Tenía razón en parte: el partido amistoso entre las dos estrellas con más posibilidades de ser formación bisagra eliminaba al resto de los rivales; pero, por otro lado, estaba aceptando que las nuevas reglas del juego están marcadas por las estrellas y los directivos de la tele.

La victoria fue, sin duda, de Salvados que hizo creer a muchos telespectadores que se encontraban ante un primer debate pre-electoral. Y tan solo fue un relaxing cup of coffee. Demasiado relaxing para lo que anda en juego.

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Sobre la firma

Elvira Lindo
Es escritora y guionista. Trabajó en RNE toda la década de los 80. Ganó el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil por 'Los Trapos Sucios' y el Biblioteca Breve por 'Una palabra tuya'. Otras novelas suyas son: 'Lo que me queda por vivir' y 'A corazón abierto'. Su último libro es 'En la boca del lobo'. Colabora en EL PAÍS y la Cadena SER.

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