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“No me creo que el dinero no dé la felicidad”

Goya Toledo es una mujer fiel a sus amigos. Mantiene una raya entre su vida profesional y privada y cree que el Gobierno debe hacer lo imposible para que los ciudadanos vivan lo mejor posible

Aurora Intxausti
Goya Toledo camino del estreno de 'El desconocido', el pasado jueves.
Goya Toledo camino del estreno de 'El desconocido', el pasado jueves. Xurxo lobato

Goya Toledo lleva una semana con la maleta a cuestas. Acaba de desfilar por la alfombra del Festival de San Sebastián presentando El desconocido, de Dani de la Torre, y el jueves lo hizo en A Coruña. Desde que decidió marcharse de su Lanzarote natal a probar suerte en el mundo de la actuación ha ido del cine a la televisión haciéndose un hueco en la complicada carrera de la interpretación. Fiel a sus amigos, tiene muchos entre los actores, es una mujer que mantiene una línea infranqueable entre su vida privada y profesional.

Pregunta. Felicidades. Acaba de cumplir 47 años. ¿Le asusta acercarse a los 50?

Respuesta. No, para nada. Cuando los tenga me sentiré igual de bien que ahora. Lo importante es mantener la ilusión por las cosas y el estado de ánimo que tengas para enfrentarte a la vida.

P. Acaba de estrenar El desconocido. ¿Le van los papeles de mujer torturada o al límite?

R.Tengo unas ganas de hacer una comedia loca que no se puede imaginar. Quiero que se vea que soy capaz de hacer un registro muy diferente al que se ha visto de mí. He hecho pequeñas cosas en comedia, pero lo cierto es que si repaso mi carrera el drama sobresale con mucha diferencia. Necesito hacer algo disparatado.

P. ¿Qué hubiese hecho si le ocurre como a muchos españoles que se han quedado sin ahorros por las preferentes? En El desconocido interpreta el papel de la mujer de un banquero.

R. Estaría desesperada. Encontrarte un día que todo lo que has ido ahorrando para el futuro ha desaparecido y sentirte estafada me daría algo. Dicen que el dinero no da la felicidad, pero yo no me lo creo. Todos aquellos a los que les toca un premio en la lotería muestran una cara sonriente y a mí me pasaría lo mismo.

Goya Toledo y Penélope Cruz, en una alfombra roja en 2004.
Goya Toledo y Penélope Cruz, en una alfombra roja en 2004.cordon press

P. ¿Le molesta que su nombre vaya asociado al de Penélope Cruz?

R. No. Pero mi vida profesional es una cosa y la personal otra muy distinta. Ser actriz me ha permitido conocer a personas estupendas que son muy importantes en mi vida. Me quieren y les quiero.

P. Hace unas fechas renunció a la presentación de un perfume, con una remuneración económica importante, para no presentarse ante las cámaras y tener que responder sobre la muerte del padre de Penélope.

R. Sé el dolor que se siente por la pérdida de un padre o una madre. Siento un enorme respeto por mis amigos. Ellos me quieren y me cuidan y yo hago lo mismo. Hay barreras que jamás deben traspasarse. Soy así y es algo que he aprendido en mi casa desde que era niña.

P. Su casa está en Madrid, pero siempre que puede se escapa a Lanzarote.

R. Te atrapan sus paisajes, te envuelve el silencio y sientes sensaciones tan intensas que no podría renunciar jamás. No puedo olvidar mi tierra, las Canarias son unas islas tan especiales que quienes las descubre, vuelven.

P. ¿Es tan discreta que la prensa no se hubiera enterado de su matrimonio si usted no lo dice?

R. No iba a salir en las revistas a contarlo, por supuesto. Pero si me pregunta: ¿Cuándo se va a casar? No voy a mentir si ya estoy casada con el músico Craig Ross.

P. ¿Le cuesta mantener su figura?

R. Siempre he sido muy delgada. Cuando era adolescente sufría porque las chicas tenían curvas y yo no. Ahora se lleva estar como yo. Son las modas. Me da un poco igual. Hago deporte porque me gusta y ahora como más sano, pero porque el cuerpo me lo pide, antes era más glotona.

P. ¿Qué hemos aprendido de la crisis que ha vivido este país?

R. A ser algo más austeros, en algunos casos. Rechazo de plano esa afirmación de algunos políticos diciendo que estábamos mal acostumbrados. Los ciudadanos nos merecemos lo mejor y en este país quien esta al mando del Gobierno tiene que hacer lo imposible para que los españoles logren la mayor calidad de vida.

P. ¿Los españoles somos solidarios con los más desfavorecidos?

R. Yo lo soy y me considero una persona comprometida. En esta vida hay que implicarse y no puedes volver la vista cuando tu vecino está sufriendo, cuando hay niños que mueren por falta de vacunas o de hambre.

P. Después de Amores perros, de Alejandro González Iñarritu, vio Hollywood más cerca. ¿Le tienta?

R. Aquella época fue maravillosa, un proyecto estupendo. Hollywood siempre atrae, pero lograr lo que han conseguido Javier Bardem, Penélope Cruz y Antonio Banderas no es nada fácil. Nada es gratis y detrás hay muchísimo trabajo. Nunca doy nada por perdido aunque no me derrumbo si no lo consigo. Me pongo metas, siempre lo he hecho, y cuando lo consigues sientes una satisfacción tremenda.

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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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