El hombre que ha cabreado a cerveceras y famosos por igual
Hablamos con Miguel Esteban, creador del videoclip de ‘Marte’, del grupo Tigres Leones
La secuencia de acontecimientos va tal que así… La banda Tigres Leones está a punto de lanzar su nuevo disco, que se titulará La Catastrofía y que contiene una canción que lleva la palabra ‘jitazo’ escrita en la frente. Se trata de Marte, tema que cuenta con voces de La Bien Querida y que homenajea a Paul Verhoeven y a Desafío Total, ahí es nada. Es una canción que pide a gritos un videoclip que, a ser posible, ayude a hacer más grande todavía la repercusión que debería tener un tema de este calibre. Así que Tigres Leones se lo encargan a Miguel Esteban.
¿Por qué a Miguel Esteban? Se lo pregunto a él mismo para que me saque de dudas: “Conozco a Tigres Leones a través de Luismi [guitarrista del grupo] porque los dos éramos guionistas en El intermedio. Somos muy amigos: a él le gustan mis animaciones y a mí me flipan sus letras y sus canciones. Son tan majos que me han dejado hacerles un tercer videoclip aunque los otros dos no los vio ni perri, como le gusta decir a Luismi”. Duda aclarada. Sigamos.
¿Dónde estábamos? En que Tigres Leones le piden a Miguel Esteban que dirija el clip de Marte. El realizador podría haber optado por lo que habría aconsejado cualquier estudiante de marketing de este país: aprovechar el rollito sci-fi de la canción para marcarse un clip impactante que calque la estética CANADA. Bien de tipas semidesnudas, a tope de vintage de librillo y barra libre de metáforas visuales que hagan pensar en sexo sin necesidad de darle demasiadas vueltas. ¿Qué hace el director? Una animación que coge los anuncios de cerveza de este verano y los convierte en un thriller tan noir como el humor que desprende. Tal cual.
Aquí el argumento: se rueda el spot de Mahou a rebosar de famosetes españoles, llega el momento de cobrar el cheque, Dani Rovira se siente dolido porque él no estaba haciendo un anuncio, Dani Rovira realmente adora Mahou, Dani Rovira sabe que Mahou tiene la mejor espuma, Dani Rovira mataría por Mahou, Dani Rovira se marca su vendetta personal contra el resto de famosetes oportunistas que estaban ahí sólo por la pasta… Y, finalmente, como en todo buen thriller, Dani Rovira encuentra la horma de su zapato, que es ni más ni menos que Quim Gutiérrez. Fin de los spoilers.
En el videoclip brillan en momentos gloriosos que ya deberían formar parte de la historia del nuevo humor lo fi patrio: Leiva que no recuerda la última vez que folló sobrio, Christina Rosenvinge que no odia la cerveza sino que es celíaca, Alaska que no bebe cerveza en la comida porque no es una animal… Una burrada. Un despropósito. Un pildorazo del mejor humor, que es el que se ríe de algo o alguien que se toma demasiado en serio a sí mismo.
Pero no todos tenemos el mismo sentido del humor. A mi siempre me pasa: voy por ahí creyendo que todo el mundo tiene mi mismo sentido del humor y, cuando no es así y hago que alguien se sienta incómodo, me siento un poco Larry David y quiero morirme. Le explico esto a Esteban y le pregunto si no le preocupa cómo puedan reaccionar algunos de los objetivos de este magistral choteo: “La única opinión que me importaba de verdad era la de Dani, porque es colega. Es un tío majísimo y no quería molestarle. Me da la impresión de que Alaska y los demás se lo tomarán bien, porque creo que habría que esforzarse para ver algo negativo en esto. Quizá a Loquillo le moleste porque, por las entrevistas que he leído, le molesta casi todo. Joder, es al que menos me conviene enfadar: mide dos putos metros”.
¿Y no es peor enfadar a esas “personas” que miden más de dos metros y que son las cerveceras productoras de los anuncios en cuestión? “Es posible que al señor Mahou y al señor Estrella Damm (¿Es un apellido también? ¿Se apellida alguien Estrella Damm?) no les haga gracia. Pero creo que no pasará nada. Hay una crítica, desde luego, pero es al mundo de las marcas y a la publicidad en general. Creo que les costaría verbalizar qué es lo que les molesta del videoclip.”
Totalmente cierto. Al fin y al cabo, la única reacción que importa aquí es la del público, y esta está siendo abrumadora: “La respuesta ha sido la hostia. El vídeo ha tenido más visitas de las que esperábamos, y gente que admiro mucho me ha dicho cosas muy bonitas. Que lo comparta Canódromo Abandonado, Cavestany, Queridoantonio, Oriol Puig Playá... Es gente con la que me casaría. Se está viralizando y todo... ¿Se dice así? ¿Viral? Sí, ¿no? Y lo guay es que así se escucha la canción, que es un hitazo. ¿Se dice así? ¿Hitazo?”
¿Ha quedado ya claro que nos encontramos ante alguien que practica el humor no como quien mira por encima del hombro sino como quien te mira a los ojos y se ríe contigo? Más pruebas de esta humildad llegan cuando le pregunto a Esteban qué obras suyas debería mirar todo aquel que vea el videoclip de Marte y se quede con ganas de más: “Me da mucho pudor que la gente vea cosas mías. De lo que más orgulloso me siento es de El fin de la comedia, una serie que protagoniza Ignatius Farray y que escribí y dirigí con Raúl Navarro para Comedy Central. Creo que la serie está guay y que Ignatius es el nuevo Marlon Brando. Pero lo que la gente debería ver es Rick & Morty. ¿La conoces? Es la mejor serie de todos los tiempos”. Sí, la conozco y soy ultrafan. Así que subscribo lo dicho por Miguel al cien por cien por mucho que eso signifique finiquitar este texto entrando en su juego y hablando de algo que no sea él mismo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.