Mi opinión sobre José María Pemán
Hay dos cosas que, no siempre afortunadamente, pero desgraciadamente muy a menudo, me aterrorizan sobre el ser humano: su incapacidad para ver las cosas de un modo amplio, juzgando según ha vivido las circunstancias, y su inevitable papanatismo. En este país llamado España, por su falta de memoria histórica, y por supuesto de conciencia sobre demasiadas cosas, tal vez esos males se producen muy por encima de la media. A un señor como José María Pemán, que apoyó de una manera u otra dictaduras y golpes de Estado, hay que llamarle por su nombre. Tal vez fuera una persona afable con su entorno y aparentemente “ejemplar”, incluso con “ideales” (¿no son terribles a veces?), pero fue cómplice de uno de los mayores crímenes realizables contra las personas: robarles la libertad.— José María Fernández Paniagua.
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