_
_
_
_
Tentaciones
MUNDO FRIKI

Cuando trollear se convierte en arte

Los DJs Mashd N Kutcher se han ganado a Internet después de quedarse con el público que esperaba un subidón masivo, demostrando que a veces ser un troll no está reñido con la lucidez

Un club lleno hasta los LEDs. Un dúo de DJs de EDM. Un ritmo que sube. Euforia colectiva esperando ese momento, el drop, que se ha convertido ya en un modo de vida para muchos clubbers. Faltan milisegundos para que llegue y, de repente, lo que suena no es una línea de bajo gordísima: es True, la balada de Spandau Ballet. El “ooooh” de decepción que se escucha es la mejor prueba de que Mashd N Kutcher, los autores de semejante bajón, acaban de trolear a su público y, de paso, de ganarse a Internet al instante, gracias al vídeo que subieron acto seguido a YouTube.

La estratagema del dúo de DJs australianos ha conseguido algo que no es habitual: dignificar al troll, esa figura despreciada (y despreciativa) que puebla las webs, foros y redes sociales y cuya única finalidad es enfangar las mentes de los internautas que prefieren no dar salida a todo su odio irracional. No obstante, hay veces que la inventiva se alía con las ganas de incordiar, proporcionándonos momentos brillantes que, en el contexto de Internet, se convierten en fenómenos masivos. Como estos.

Lo dijo Kurt (o no)

Ya es un clásico adaptado a todo tipo de formas y personajes, pero en algún lugar de la red debe encontrarse el primer troll al que se le ocurrió aprovechar la ola de las imágenes con citas presuntamente motivadoras para cortar los cables y producir cortocircuitos mentales en los internautas. Los objetivos de esta táctica pueden ser desde figuras históricas como Ghandi o Einstein, pero Kurt Cobain, como gran icono de los 90, es uno de los personajes del que más se han aprovechado. Al líder de Nirvana se le puede atribuir extractos de canciones de Aerosmith o ataques a Dave Grohl. La estrategia se fue enrevesando aun más cuando se incluyó una nueva variante: una foto de otra persona famosa que no tiene nada que ver. O cuando se pone a la venta merchandising irónico.

El festival del Uranio

Norcoreano no necesita presentación, pero en esta lista no podemos dejar fuera su encuentro virtual con Leticia Sabater y el Festival del Uranio. Por si alguien no lo recuerda, el falso líder tuitero invitó a la cantante y personality a actuar en un festival ficticio en Corea del Norte. Leticia aceptó encantada y le pidió que al clon de Kim Jong-un una oferta por mail. Desde entonces, norcoreano ha negociado las apariciones de Dinio o Malena Gracia, con resultados similares.

Jimmy Kimmel, embaucador profesional

Puede que no tenga la experiencia de David Letterman o que no sepa bailar como Jimmy Fallon, pero Jimmy Kimmel cuenta con un arma secreta para ser uno de los mejores presentadores de late night shows: es el más cabrón. A lo largo de los últimos años, Kimmel y su equipo se han pasado por Coachella para preguntarle al público por grupos inexistentes, han dejado a niños sin sus dulces de Halloween o, incluso, ha jugado con las expectativas de los bebedores de café en el día de los inocentes anglosajón. Todo ello le convierten en el troll oficial de la televisión, algo que lleva a mucha honra.

Justin Bieber en Corea del Norte

La del Festival del Uranio no es la única actuación que pudo tener lugar en Corea del Norte. En 2010, un Justin Bieber pre-tatuajes y todavía con camiseta puso en marcha un concurso on-line llamado My World Tour, mediante el que los usuarios podían votar el lugar donde el ídolo adolescente ofrecería un concierto. En una de esas esporádicas trolleadas colectivas, más de seiscientas mil personas votaron para que Biebz actuase en el país de Kim Jong-Un (el de verdad). El resultado hubiese hecho palidecer a la visita de Dennis Rodman a Pyongyang pero, lamentablemente, nunca tuvo lugar.

No es Taylor, es Becky

Que Taylor Swift es una chica lista y consciente de su poder es algo que se encarga de demostrarnos a menudo, pero también es alguien con el sentido del humor suficiente como para darle la vuelta a las bromas de los trolls, incluso cuando ella es solo un elemento colateral. La prueba llegó con el meme conocido como “No, It’s Becky”, creado de forma inconsciente por una internauta poco ducha en las artes de la ironía que compartió la foto de una excompañera de clase con un parecido notable con la cantante y que había acabado mal en la vida tras “esnifar” marihuana. Al comentario de alguien sobre el parecido de esta pobre chica con Taylor, ella respondió con esa frase mágica que sirvió de base para todo tipo de bromas y montajes. Taylor, atenta a las redes, recogió el guante y sorprendió con una camiseta mostaza con ese mensaje escrito: “no its becky”. Algo así como trollear a los trolls, y ganarse a Internet en el proceso.

Patton Oswalt se queda con Twitter

Los fans de la comedia estadounidense seguro que conocen a Patton Oswalt, siempre dispuesto a ser el grano en el culo de los sectores más conservadores de Estados Unidos. Siempre dispuesto a probar los límites de la percepción del público, Oswalt realizó un experimento en 2013 en su cuenta de Twitter, en la que compartió mensajes chocantes con comentarios racistas, misóginos o en contra del aborto. En realidad, había que cambiarlos de orden para descubrir que su sentido era completamente opuesto. Eso sí, la broma le costó perder unos cuantos followers, además de una buena cantidad de menciones poco halagadoras.

Kanye es un loser

Cuando Kanye West casi interrumpió a Beck en la ceremonia de entrega de los Grammy, se abrió una caja de pandora en Internet de proporciones bíblicas. Si el autor de Yeezus siempre lo ha puesto fácil a haters y graciosos por igual, en esta ocasión las respuestas se multiplicaron. Una de las más creativas fue la de un usuario desconocido que se tomó la molestia de comprar el dominio www.loser.com, en honor al primer éxito de Beck, que desde entonces redirecciona a… la entrada de Kanye West en Wikipedia.

Nunca te dejaré

Puede que no fuese la primera trolleada masiva, pero es sin duda la que más se extendió. El momento en el que alguien tuvo la idea de utilizar el Never Gonna Give You Up de Rick Astley como contrapunto a algo muy esperado se abrió una vía que todavía no se ha cerrado. El rickrolling se expandió como un virus, y que tire el primer click aquel que no cayó en el engaño, llevándose un chasco similar al del público que esperaba ese drop en la actuación con la que comenzábamos esta lista.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_