El mundo de Los Ganglios es mejor que el tuyo

Hagamos la prueba: ¿a qué lector no le han pasado alguna vez un link de un vídeo de Los Ganglios diciendo “tienes que ver esto”? Los hermanos Xoxe Tétano y Rafa Filete (extremeños viviendo en Cataluña) y la sueca Leli Loro llevan años publicando en Internet criaturas híbridas que descolocan, primero, y hacen bailar, después. Pueden tener la forma de una cumbia sobre Jacques Cousteau y Félix Rodríguez de la Fuente, un himno bakala al subiduki, un merengue sobre los calvos o la oda definitiva a la pobreza lingüística de la era Internet. No, no estamos ante un grupo que se tome muy en serio a sí mismo, pero eso no significa que tengamos que tomárnoslo a broma. “La música popular es un terreno abonado para músicos malos”, cuenta Rafa, “los virtuosos caen mal”. Nos asomamos al universo ganglionar y lo separamos en pequeñas muestras para el microscopio

El fotomontaje

“Xoxe le pintó una pupila al ojo hueco de Nefertiti en la Espasa-Calpe familiar”, recuerda Rafa. “Acabaron descubriéndolo y le cayó la bronca de que en las enciclopedias no se pinta, que son para toda la vida”. Ahora usan Photoshop para pintarle calvas a Julio Iglesias y así nadie se enfada

Babieca

En Babieca hiede, los Ganglios dedican toda una canción al pestazo del caballo del Cid. Pero... ¿qué les ha hecho el pobre animal? “Suponemos que Babieca olía a montuno como todos los caballos, sencillamente eso. El Cid pasó muchas horas sobre él, y no creo que se duchase a diario”. Argumento irrebatible.

La cumbia

“El gusto por la cumbia nos lo pegó un amigo argentino con el que compartimos casa en Suecia”, explican. “Cumbia hay de muchas clases, a nosotros nos gusta la peor. Recomendamos a Dick el Demasiado”. Ellos le dedicaron una a Jacques Cousteau y Félix Rodríguez de la Fuente.

Robocop, David el gnomo, Pepa Bueno…

… Y muchos otros más han aparecido en sus canciones. “Principalmente elegimos a los personajes por el nombre, por cuestiones métricas y de sonoridad”, aseguran. “También hacemos descartes basándonos en caprichos arbitrarios. Por ejemplo no nos gusta que estén muy de actualidad. Aunque a veces sí”. ¿A quién no incluirían un una canción? “A ningún político en activo”.

El directo

Los Ganglios asumen sin problemas que son “muy malos” en directo, aunque sus conciertos cada vez atraen a más fans que buscan dejarse sorprender con sus ideas escénicas. “Queríamos cobrar la entrada a través de una picadora de documentos”, dicen, “pero no se puede hacer eso porque destruir billetes es un delito tipificado en la constitución”. Lo han sustituido por algo menos ilegal: “un proyector de diapositivas y un powerpoint clásico, patillero y efectivo, como los trovadores medievales”.

El Porc

No, no es un sindicato de fabricantes de productos porcinos. El porc es “un género que hemos acuñado para responder a la pregunta de "¿quiénes sois? / ¿qué hacéis?", según sus propias palabras. Algo útil para las entrevistas, pero que puede volverse en su contra. “Ya se ha dado el caso de que un fan nos ha recriminado que alguna de nuestras creaciones recientes "YA NO ERA PORC". Esto de los géneros musicales puede convertirse en un grillete al tobillo”

Las influencias

¿De dónde sacan la catarata de influencias, que van desde la alta a la baja cultura o la basura más inmunda de Internet? “En general nos gusta el arte que es poco elegante”, explican Rafa y Xoxe. “La elegancia es un concepto conservador basado en el miedo al ridículo. Series de televisión no vemos. Nos gusta el cine en general, cosas más cinéfilas como Bresson y Rohmer, y también cine familiar tipo Esta casa es una ruina. Nos gustan mucho los cuadros de Philip Guston, los dibujos de Nazario o los murales románicos”.

El humor

Los Ganglios han colaborado con Lorena Álvarez (en Al final) y harán lo propio en el futuro con el cantautor Juan Carlos Roldán, el grupo Las Ruinas o el colectivo Chicotrópico. Pero no solo se identifican con músicos. “También nos sentimos cercanos a ciertos humoristas gráficos, como Alberto González y Miguel Noguera”, explican. “Es posible que, si escuchan nuestras canciones, piensen que les estamos copieteando ideas, porque a veces la similitud de las referencias y las temáticas es grande. Pero no les copiamos, ¿eh?, todo se debe a asuntos de resonancias y nubes telepáticas”.

La calvicie

En Calvario, una de las canciones de su último disco, Lubricante, Los Ganglios hablan sobre uno de los pocos colectivos en los que nadie ha pedido entrar. “No eran fachas, ni eran rojos, eran calvos”, cantan. ¿Por qué dedicarles una canción? “La calvicie la usamos como imagen metafórica: la adultez como antesala de la muerte”, nos cuentan. “La fugacidad de la vida es un tema de siempre”. Sí, ya.

El indie

A un grupo tan en su propio mundo como Los Ganglios, ¿qué les parecerá la escena indie? ¿Les aburre? “¿Porqué iba a ser así?, contestan. “Los Planetas y compañía están muy bien, toda la música es buena. Hay mucho odio en el mundo de la música, al personal le encanta criticar destructivamente a los grupos, y nos parece muy feo eso. Los músicos no son asesinos de masas ni banqueros”.

Los Ganglios actuarán en Madrid (5 de junio, Sala Caracol) y el festival Contempopranea (Badajoz, 5 y 6 de junio).