Perfiles necesarios
Necesitamos, más que nunca, candidatos que huelan a calle y no a despacho; que hablen el idioma de todos y no cifren crípticamente sus mensajes para que nadie entienda y pocos puedan reprochar; que se abran al diálogo responsable y no se plieguen ni enroquen en principios inamovibles o en apelaciones emocionales; que propongan y no impongan; que velen por la inclusión y no propicien la exclusión ni la fractura social; que sean tan honradamente humanos como buenos gestores; que sean humildes para reconocer sus fracasos y no gritar sus éxitos; que sepan mirar a su lado en la bancada sin encontrar enemigos y, sobre todo, que asuman la temporalidad de su responsabilidad. Necesitamos buenos candidatos, algo más que siglas políticas.— Sergio Martín Rodríguez.