10 fotosSorolla, dibujante compulsivoJoaquín Sorolla muestra en sus cuadernos cómo eran los ambientes que le rodeaban su familia, sus viajes, su hogar...Rut de las Heras Bretín30 oct 2014 - 00:07CETWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceA Clotilde García, su esposa, la retrata en cualquier situación, en este caso con vestido elegante. Está posando para una de sus obras más conocidas 'Clotilde con traje negro'. El uso del color en sus dibujos es excepcional. El trazo rojo de esta imagen es óleo que acompaña al clarión (blanco) y al carboncillo.En esta fotografía se ve cómo el pintor está dibujando sobre el lienzo el retrato de Clotilde con traje negro. En este caso es un dibujo preparatorio para realizar posteriormente el óleo.Otro de sus temas característicos son los jardines. El pintor valenciano se inspiró en los de los Reales Alcázares de Sevilla y de la Alhambra de Granada para diseñar los jardines de su casa. Los dibujos están plagados de anotaciones en las que señala las plantas o flores que quiere plantar en cada lugar. Las fuentes, el agua y las acequias como en los jardines andaluces tienen un papel importante en los dibujos de Sorolla.La representación de escenas al aire libre son un continuo en la carrera de Joaquín Sorolla. Tiene la misma rapidez y soltura con el pincel que con el lápiz y con ambas técnicas plasma la luz y la brisa marina. Esta barca tiene la vela hinchada por el viento, la zona que queda en sombra está marcada con líneas horizontales.Sorolla dibujaba casi sin mirar el papel. En esta escena de playa en la que se puede observar una mujer vemos como hay trazos sin cortes en los que no parece levantar el lápiz. Dibujaba mientras miraba a su modelo, su ágil mano seguía lo que veían sus ojos.Prueba de que era un dibujante compulsivo es la cantidad de menús de restaurantes que hay dibujados por el reverso. Cuando viajaba solo, Sorolla dibujaba lo que veía en las cafeterías donde comía. Aquí se fija en un camarero del hotel Blackstone de Chicago donde estuvo alojado entre el 2 de febrero y el 20 de abril de 1911.Las fechas de los dibujos son totalmente identificables ya que vienen impresas en los menús, en este caso 27 de marzo de 1911. La estancia de Sorolla en Chicago se debía a la preparación de una exposición del pintor en el Art Institute.Los retratos hechos en cafeterías son un verdadero catálogo dedicado a la moda femenina, especialmente a los sombreros. A Sorolla le gustaba comentar con Clotilde la vestimenta de los comensales, ha quedado muchas pruebas de esto en su correspondencia.La representación de escenas urbanas es otro de los temas recurrentes del valenciano. Van desde las notas de color de la calle de París que veía desde uno de los hoteles donde se alojaba, hasta este dibujo a tinta de la catedral de Colonia, acompañada de anotaciones. Gracias a los dibujos que realizó en el tren y a las imágenes de las ciudades alemanas se ha podido documentar un viaje de Sorolla a Berlín.Dibuja todo lo que ve, hasta a él mismo reflejado en una cafetera, en la mano: un lápiz; al pie del dibujo, un texto: "Dentro de la cafetera".