Sobre Cataluña
Ante la gran cantidad de opiniones, declaraciones, propuestas, argumentos a favor y en contra del proceso soberanista en Cataluña, quisiera proponerle desde aquí a todos los políticos que están comprometidos con este tema que hagan un debate público, emitido a la vez por todas las cadenas de televisión pública y las privadas que tuviesen interés en ello, donde puedan confrontar sus ideas, dar explicaciones de por qué se posicionan a favor o en contra y cuáles son sus argumentos. También sería interesante que aceptasen preguntas de los televidentes. Creo que todo esto serviría para aclarar las ideas de los ciudadanos, y dada la importancia del tema, el debate no debería tener ninguna limitación de tiempo: que acabe cuando no haya más que decir.— Benjamín López Pasca.Tarragona.
¿Cómo piensa y siente un catalán normal respecto al independentismo? A través de los medios y de hablar de ello sólo con otros catalanes, probablemente crea que, respecto al conjunto de España: a) No se quiere a los catalanes. b) Los catalanes pagan mucho más de impuestos. c) Cataluña soporta la carga de las zonas atrasadas.
Habría que decir a ese catalán normal que se pare a pensar por sí mismo y que valore sinceramente qué hay de verdad, qué de exageración y qué de falso en todo lo que se le dice. Y para ayudarle, le sugiero que se plantee las siguientes preguntas. ¿Cree que una agencia tributaria, o unos tribunales, estrictamente catalanes, se atreverían con un expresident? ¿Cree que en Europa están deseando una Cataluña fuera del Estado español? ¿Cree que es bueno para unos y otros que aumenten los resquemores, afortunadamente aún no graves, entre catalanes y resto de españoles? ¿Qué nuevas libertades espera obtener? Finalmente, ¿cree que en los asuntos importantes hay que decidir con la cabeza fría, sin dejarse arrastrar por emociones colectivas? Si la respuesta es afirmativa, piense y actúe en consecuencia, por favor, porque todo esto nos puede costar muy caro a todos.— Alfredo Díez Esteban. Madrid.
Artur Mas dice que “deben escuchar el clamor pacífico y democrático del pueblo catalán”. Quien escribe, un catalán y español, cree que lo democrático es cumplir la ley que aprobó el 61,24% del censo electoral catalán y quien representa la Constitución, si no quiere cumplirla debe dimitir, pero nunca inducir a un pueblo hacia la ilegalidad.— Manuel González Cervantes. Barcelona.
