Sobre la polémica monarquía o república

Después de leer y escuchar opiniones diferentes sobre la polémica monarquía o república me he decidido a añadir mi opinión. Pienso que es fundamental recordar el momento histórico en el que ambos, monarquía y Constitución vieron la luz en nuestro país; 1975 la una, con los restos del dictador prácticamente aún calientes, y 1978 la otra, escrita por unos nombrados y desconocidos padres de la patria, y votada por un pueblo que no estaba acostumbrado a votar y que esperaba que la tal Constitución no resultara demasiado mala confiando en que al menos fuera mejor que las leyes de la dictadura aún vigentes.

Cuarenta años después tanto la monarquía como la Constitución han dado un excelente juego y han permitido que los españoles fuéramos entendiendo lo que significa vivir en democracia, nuestros derechos y responsabilidades. Es un hecho que si la monarquía y la Constitución no han cambiado en este tiempo, el pueblo sí lo ha hecho. Los antiguos 40 años de miedo y obediencia han pasado a ser casi otros 40 de madurez y es ahora cuando estamos en condiciones de elegir. El negarnos al pueblo ese derecho no es más que la negación de nuestra mayoría de edad.

Nuestra monarquía, sin tradición y restaurada por un dictador, no es comparable a ninguna de las monarquías europeas. Si en su momento sirvió de tránsito para la democracia, necesitará el respaldo popular si quiere sobrevivir. La consulta al pueblo, fuera cual fuere el resultado, significaría por fin dejar atrás los legados de la dictadura y terminar por completo el periodo de la transición.— Pilar Muñoz.