Se vende piso en Park Avenue, referencia: embajada de Francia

La residencia del embajador de Francia ante las Naciones Unidas es una de las propiedades más envidiadas de Nueva York. Al entrar, da la sensación de que se está en un museo. El espacio impone. Allí, en el mismo edificio que se alza en el emblemático 740 Park Avenue viven también Steve Schwarzman, cofundador del fondo de inversión Blackstone, o el magnate industrial David Koch, dos de las figuras más poderosas en el mundo de los negocios.

El espléndido apartamento de 650 metros cuadrados está ahora oficialmente en el mercado por 48 millones de dólares, unos 35 millones de euros al cambio. París, que ocupa uno de los cinco asientos del Consejo de Seguridad reservados a las potencias con poder de veto, no puede permitirse pagar los 290.000 dólares que cuesta mantenerlo al año en costes de comunidad e impuestos. O al menos no puede justificarlos mientras recorta gasto.

Lo que no le va a costar mucho es encontrar comprador en un mercado en el que los grandes espacios brillan por su ausencia y repleto de inversores con efectivo listo para saltar a la caza de cualquier oportunidad. El Gobierno francés lleva tiempo, además, modificando el plano de sus propiedades inmobiliarias en la ciudad de los rascacielos, donde el 740 Park Avenue es una de las direcciones más preciadas en la isla.

El complejo de 19 plantas, construido en los primeros años de la Gran Depresión, consta de 31 viviendas. Hay otros nombres que se asocian con el edificio, como el del novelista Jerzy Kosinski, la diseñadora Vera Wang, Ronald Lauder, hijo de Estée Lauder, o Woody Johnson, heredero del imperio Johnson & Johnson y propietario de los New York Jets. Allí también vivió dos décadas John Rockefeller y se crió Jacqueline Kennedy Onassis.

El 740 Park Avenue fue recientemente objeto de un documental sobre la desigualdad creciente en EE UU. La decisión de vender la residencia que ahora ocupa Gerard Araud se tomó hace un año, pero no fue hasta hace unos días cuando se le puso precio. En otro edificio en otro barrio de Manhattan, valdría más o menos la mitad. Está a solo una manzana de la residencia del embajador de España, en la calle 72, a un tiro de piedra de Central Park.

No es solo esta concentración de multimillonarios lo que eleva el caché de este apartamento que ocupa las plantas 12 y 13 del citado edificio. Consta de seis habitaciones y siete cuartos de baño. Ocupa toda una esquina, lo que le permite tener hasta 38 ventanas. Para Quai d´Orsay -como se conoce al Ministerio de Exteriores- la operación va a suponer un negocio redondo. Compró el apartamento por 600.000 dólares en 1978, o unos dos millones actuales.

El apretón de cinturón también llevó al Gobierno portugués a poner a la venta la residencia de su embajador en el Dakota, justo al otro lado del parque. Ese apartamento era más pequeño. Y aunque el edificio tiene la fama entre los turistas porque allí vivió John Lennon, no acumula tanta riqueza y opulencia como el 740 Park Avenue. Se pagaron al final hace un año 11,5 millones por el inmueble, cuando se pedían 14,5 millones.