El piloto revelación, Marc Márquez, de 20 años, se ha convertido en una estrella con todo el aplomo de los líderes. El 'rookie' forma parte del equipo Repsol Honda, el más poderoso de la parrilla.Márquez, antes de salir a pista.La próxima temporada se verán cambios. En la fotografía, el prototipo del motor de la Honda para 2014, en la celda de investigación del centro tecnológico de Repsol, en Móstoles (Madrid). Aquí se desarrolla la gasolina del año que viene.Igual que en la Fórmula 1, se cuida hasta el última detalle. Arriba, uno de los mecánicos manteniendo calientes los neumáticos con unas fundas térmicas. En los entrenamientos, cada uno de los pilotos usa dos motos.Dani Pedrosa, el compañero de Márquez, tiene 27 años y en su palmarés cuenta con un Campeonato del Mundo de 125cc en 2003, dos en la categoría de 250cc en 2004 y 2005 y el subcampeonato del mundo de MotoGP en 2007, 2010 y 2012. Cuando se le pide que juzgue su carrera, afirma: “Me considero un privilegiado. Todas mis expectativas siempre fueron inferiores a lo que he conseguido. He representado a mi país y he sido un modelo de esfuerzo para muchos niños. Soy un afortunado”.Los orígenes de Marc Márquez son humildes. Su padre, Julià Márquez (a quien da la mano en la fotografía), era un albañil en paro aficionado a las motos que le ha acompañado a lo largo de toda su carrera por el mundo. A su lado, el jefe de mecánicos de Márquez, Bruno Leoni. En esta temporada, el piloto de Repsol ha ido organizando su propio equipo de ingenieros y mecánicos de confianza, principalmente provenientes de la cantera de la escuela Monlau, entre ellos, Santi Hernández, Carlos Liñán, Jordi Castellà , Javier Ortiz y Hugo Bucher.“Lo que tienes que tener claro es por qué te has caído, qué has hecho mal, porque si no entiendes el motivo, puedes perder la confianza, y entonces estás acabado”, dice Márquez. En la imagen, el joven en el circuito de Motegi.
