4 acciones para romper el matrimonio Estado-eléctricas
Por Héctor de Prado Herrero, responsable del área de cambio climático y energía de Amigos de la Tierra España
¿Has jugado alguna vez al famoso juego de la soga en el que dos equipos alineados al final de una cuerda ponen a prueba su fuerza? Pues este símil podría servir para describir el actual conflicto de intereses que, según se acabe resolviendo la reforma, marcará el futuro panorama energético de este país.
Las partes
Por un lado las miles de familias, agricultores, y pequeñas empresas que invirtieron sus ahorros hace unos años en plantas de generación de energía limpia –por ser, además de económicamente rentable, beneficioso para el medio ambiente-, secundados por los ecologistas y por unas políticas europeas con marcada tendencia a “descarbonizar” nuestra sociedad. Por el otro, a los responsables del oligopolio energético en este país, que cuentan con el valioso apoyo de una Administración pública demasiado parcial y sujeta a sus propios intereses. En otras palabras, este juego de la soga es el juego del interés común contra el interés privado.
Algo se está moviendo
A raíz de las reiteradas subidas de la factura de la luz y a la labor de programas divulgativos como Salvados o de la Plataforma por un nuevo modelo energético, hay cada vez más personas hartas del matrimonio “Gobierno-Eléctricas” dispuestas a pasar a la acción.
La situación no es para menos: no solo pretenden que todos paguemos el pato de sus malas inversiones en el pasado y que se penalice al consumidor responsable, sino que además nos dicen que las energías renovables son las culpables de todo. ¿Por qué? Porque éstas últimas, bien gestionadas y con participación de la gente, pueden ser la clave para hacer tambalear el actual modelo energético (sucio, ineficiente, centralizado y en manos de unos pocos).
¿Cómo hacerlo?
Lo primero es pensar de qué lado queremos estar y a no ser que estés dentro de la familia del oligopolio energético, seguramente lo tengas muy claro. Desde Amigos de la Tierra te proponemos algunas pautas para ganar el juego de la soga y lograr una energía limpia y descentralizada:
- Hazte
desobediente solar:
es decir, mediante una participación económica (desde 100€) en
una instalación solar fotovoltaica sobre un tejado, te conviertes
en co-propietario de la misma a la par que ayudas a expulsar del
sistema la electricidad que proviene de energías sucias como el
carbón, el petróleo o el uranio. Ayudas a frenar el cambio
climático y reduces tu huella ambiental, pero sobre todo
“desobedeces” a las grandes compañías. Más información en
Huerta
Solar Amigos de la Tierra.
- Cámbiate
de comercializadora eléctrica: aunque
no te lo creas, existen más de 100 comercializadoras registradas en
el Estado español. Y entre ellas, algunas hacen verdaderos
esfuerzos para generar energía a partir de renovables y de una
forma democrática. El servicio de atención suele ser muy cuidadoso
con el cliente, y resuelven cualquier tipo de duda, como ¿pero me
saldrá más caro? Puedes encontrarte más información en
Mecambio.net.
- Apoya
las Acciones Directas no Violentas y las ciberacciones.
Por un lado, entérate si existe algún nodo de la Plataforma
por un nuevo modelo energético cerca de tu casa, o anímate a
crear uno, hay mucha gente con ganas de pasar a la acción. También
puedes ponerte en contacto con asociaciones ecologistas de carácter
local o estatal para que te orienten. Y por supuesto, firmar y
difundir acciones on-line. Por ejemplo, a lo largo del año, casi
200.000 personas ya han mostrado su apoyo en Avaaz
a la demanda de una Auditoría del sistema español para evitar el
expolio que están llevando a cabo las Eléctricas en nuestros
bolsillos.
- Conviértete en productor de energía limpia. A pesar de que el Gobierno y las empresas del oligopolio quieren desmotivar la aparición de nuevos productores de energía, ya sea para el autoconsumo, el balance neto o la venta a la red, el futuro energético será renovable o no será. Tarde o temprano, “cultivaremos” nuestra propia energía. Por mucho que el Gobierno quiera aprobar los proyectos de Ley, merece la pena hacer números: ahorraremos mucho dinero, colectivizaremos las decisiones en materia de energía y restaremos poder a las empresas energéticas.
Súmate a las miles de personas que no están dispuestas a seguir pagando la energía más cara de Europa a un elevado coste ambiental. Es el momento de pasar a la acción. Porque si consentimos esta involución, si les concedemos la victoria en este juego de la soga, hipotecarán nuestro futuro - y usarán la cuerda para atarla al cuello de las generaciones venideras.
Fotografía de apertura: Cuadro "The Parisians Pull the Devil by the Tail", de Jean Véber (1864-1928). Fotografía de Karl Steel, Creative Commons
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