En defensa de la libertad de expresión

En estos tiempos difíciles hemos visto manifestaciones y huelgas, y hemos escuchado una gama amplia de opiniones conflictivas sobre cómo solucionar los problemas a los que nos enfrentamos. La democracia y el derecho universal de libertad de expresión implican que la gente pueda dar su opinión sin miedo a las consecuencias. En Irán, este derecho no es respetado y muchos están encarcelados por el hecho de manifestar pacíficamente su desacuerdo con el Estado.

Majid Tavakkoli, el ganador del Premio de la Paz de los Estudiantes Noruegos de 2013, es un estudiante iraní de ingeniería y líder de un movimiento estudiantil que lleva encarcelado desde 2009. Dio un discurso en su universidad contra el proceso antidemocrático que había llevado a Ahmadineyad al poder en junio de 2009. Majid fue condenado a nueve años de cárcel. Además se le ha prohibido continuar con sus estudios, y se le ha trasladado a una prisión localizada lejos de su domicilio familiar.

Es nuestra responsabilidad proteger a los ciudadanos de nuestro país sea cual sea su opinión, y no podemos olvidar a los que nuestros ojos no ven. Tenemos que enseñar a las autoridades que quieren silenciar a los manifestantes pacíficos que no nos pueden silenciar a todos.— Cecilia Gibbons.