Siete Navidades muy ‘bizarras’
Procesión perahera en Kandy (Sri Lanka), frente al Dalada Maligawa, el Templo del Diente./ Kay MaeritzEsta noche es Nochebuena y mañana Navidad, pero antes de que me fusiléis con tapones de cava o peor aún, con citas del diccionario de la RAE por escribir “bizarras” en el título, una aclaración: sé que bizarro, en español, significa valiente, aguerrido, no raro o extravagante como en inglés o en francés. Lo he puesto por chinchar un poco, pero entre comillas. Los Reyes Magos me traerán carbón, por malo. O al Krampus, que da más miedo. ¡Feliz Navidad! O no.
01 Perahera (Sri Lanka)
En Sri Lanka (Ceilán) no hay belenes (la mayoría de los cingaleses son budistas), pero hay muchos elefantes. Durante las Perahera, procesiones en honor de Buda que se celebran con la luna llena (la más famosa es la de agosto, o Esala Perahera), paquidermos de todos los rincones de esta isla del Índico desfilan por las calles de la ciudad adornados con bombillas y sedas de colores, junto a un cortejo de antorchas, músicos, danzantes, monjes budistas y acróbatas. A la cabeza de la procesión va el elefante de mayor tamaño, que porta el cofre donde se guarda un diente de Buda.
Krampus, demonio que acompaña a San Nicolás en el folclore alpino. / Wikimedia
02 El Krampus (Austria)
En España y otros lugares, los niños malos reciben carbón en Reyes. O en Nochebuena, si los regalos se los trae Papá Noel. Tienen suerte. En Austria, a los niños malos se los lleva en un cesto el Krampus, un horrible demonio vestido de pieles que acompaña a San Nicolás, tan modosito él. La espeluznante criatura, entre diablo y vampiro, aparece bajo distintos nombres en el folklore alpino, y tiene su origen en los rituales paganos del solsticio de invierno.
03 Frau Bertha (Alemania, Austria y Suiza)
Si el Krampus os parece horrible, esperad a conocer a su prima Bertha, alias Holda, Perchta o Berchta, también conocida como Weisse Frauen, la Dama Blanca. Otra simpática criatura de la mitología germánica asociada al solsticio de invierno que aparece en varios de los cuentos de los hermanos Grimm. ¿Adivináis quién es? Exacto: la bruja de Hansel y Gretel, la que se come a los niños después de sacarles las tripas. También la madrastra de Blancanieves. Y la bruja de La Cenicienta. Mala, más que mala.
Cartel de la serie de televisión Embrujada.
04 La Befana (Italia)
En Italia, la bruja de la Navidad se llama Befana (Epifanía), una versión benigna de frau Berta. Con menos posibles que Santa Claus y los Reyes Magos (la pobre no tiene ni trineo de renos ni camellos), reparte los juguetes de los niños italianos la noche del 5 al 6 de enero montada en su escoba, como Harry Potter. También se la relaciona con las fiestas romanas en honor al dios Jano, que marcaban el comienzo del año (enero viene de Jano).
San Nicolás (Papá Noel o Santa Claus), entre dos Zwarte Piet. / Wikimedia
05 Zwarte Piet (Holanda)
La versión holandesa y amable del Krampus es un paje español de pelo rizado y con el rostro tiznado: Zwarte Piet (Pedro el Negro). Esta especie de Baltasar sin corona ayuda a San Nicolás (alias Santa Claus, alias Papá Noel) a repartir juguetes entre los niños holandeses la noche del 5 de diciembre, un mes antes que los Reyes Magos, por eso a veces no encontráis los juguetes que se pidieron vuestros niños. Como muchos holandeses, San Nicolás vive todo el año en España.
Un Tió de Nadal bien abrigadito, para que no pase frío./ Wikimedia
06 Tió de Nadal (Cataluña, España)
Receta del Tió de Nadal:
Se lleva un tronco de árbol a casa.
Se le tapa bien con una manta, para que no coja frío.
Se le alimenta hasta Nochebuena.
La noche del 24 de diciembre se le golpea con palos, para que defeque turrón y chuches.
Mari Lwyd y sus grandes ojos verdes. / Wikimedia
07 Mari Lwyd (Gales, Reino Unido)
Mari Lwyd es como la mula del pesebre, pero sin carne. Una tradición galesa de origen celta que aún pervive en el condado de Glamorgan, en la que grupos de jóvenes van de casa en casa con un personaje disfrazado con una calavera de mula o caballo --Mari Lwyd, María la Venerable-- mientras cantan pidiendo dinero, comida o bebida. Como el "truco o trato" de Halloween, pero en Navidad.
¿Conoces más formas curiosas de celebrar las Navidades?
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