Depardieu se pone a las órdenes de la hija del dictador uzbeko

El actor francés Gerard Depardieu se ha comprometido a participar en una serie histórica escrita por la hija mayor del dictador uzbeco Karimov, Gulnara Karimova. Multimillonaria, guapa y con dotes de mando, ahora se ha metido a escribir un guion que ha titulado The Theft of the White Cocoon, una historia sobre el origen de la famosa seda de Asia central.

Depardieu viajó a Uzbekistán, un estado mayoritariamente musulmán con una población de alrededor de 30 millones de personas, a principios de esta semana. En la producción, el actor interpretará a un monje. "Creo que es una gran idea para recrear los tiempos antiguos y comprender el secreto de la creación de la seda. Para mí, la historia y el proyecto en sí son muy interesantes y voy a participar con placer", dijo el actor según han comentado los portavoces del proyecto.

Educada en Harvard, Karimova, de 40 años, se ha convertido en un rostro público del país exsoviético, que actúa como su representante permanente en las Naciones Unidas en Ginebra y como su embajador en España hasta el año pasado. También realiza joyas, cosméticos y líneas de ropa bajo la etiqueta Guli. Pero no solo eso. A la vez es una estrella del pop que actúa con el nombre de GooGoosha. La hija mimada del dictador uzbeco, Islam Karimov, se ha empeñado en triunfar en Occidente. La princesa de Uzbekistán, a la que se atribuye una fortuna superior a los 500 millones de euros aspira también a convertirse en la nueva reina del pop. Está dispuesta a hacer sombra a Lady Gaga, Shakira, Beyoncé, Madonna o Lana del Rey, y hace unos meses presentó un álbum en Nueva York.

Doctorada en Políticas y con un máster por la Universidad de Harvard, ha vivido muy de cerca la gestión de su padre, el presidente Karimov, de 74 años, que gobierna desde 1991. La República de Uzbekistán es considerada uno de los Estados más represivos del mundo, junto a Corea del Norte y Birmania, en los rankings de las organizaciones de derechos humanos.