Matthew McConaughey se pone en la piel del presidente Kennedy
El actor protagoniza la película The butler, basada en la historia de un mayordomo de la Casa Blanca, que trabajó para ocho presidentes
Con 43 años de edad, fue el candidato presidencial del Partido Demócrata en las elecciones de 1960, derrotando a Richard Nixon en una de las votaciones más ajustadas de la historia presidencial del país. John Fitzgerald Kennedy fue el presidente más joven en ganar los comicios en Estados Unidos y murió el 22 de noviembre de 1963 en Dallas (Texas) a manos de un francotirador. Casi 50 años después del magnicidio, el interés por la familia Kennedy y su numerosos miembros —que acumulan desgracia tras desgracia— sigue casi intacto. Hasta el punto de que su figura vuelve a ser carne de biopic. Ahora Mathew McConaughey, que hace unos días promocionaba en Cannes junto a Reese Witherspoon su película Mud, será quien se ponga en la piel del 35º presidente de los Estados Unidos, en su próxima largometraje The butler.
El filme cuenta la historia de Eugene Allen, un mayordomo que prestó su servicio a ocho presidentes diferentes de la Casa Blanca durante 34 años. El exnovio de Penélope Cruz, hoy felizmente emparejado con la modelo brasileña Camila Alves y padre de dos hijos, compartirá reparto con otras estrellas de Hollywood. El funcionario Allen será interpretado por Forest Whitaker, ganador de un Oscar por El último rey de Escocia. El papel de su esposa Elena será para la presentadora Oprah Winfrey. Minka Kelly (Los Ángeles de Charlie) interpretará a Jackie Kennedy; Jane Fonda hará de la primera dama Nancy Reagan y Alan Rickman (Harry Potter) encarnará a su marido Ronald Reagan. El papel del presidente Richard Nixon ha ido a parar a manos de John Cusack. Lee Daniel (Precious), que también ha presentado su último filme en Cannes, The paperboy, comenzará con el rodaje a finales del verano, y vuelve a contratar a dos actores de The paperboy: McConaughey y Cusack.
Allen nació 14 de julio 1919, en Scottsville, Virginia. En 1952, se enteró de una oferta de trabajo en la Casa Blanca y fue contratado para lavar los platos, abrillantar la plata y ordenar los armarios. Cuando John F. Kennedy fue asesinado, el señor Allen fue invitado al funeral. Se negó por la más generosa de las razones: “Alguien tenía que estar en la Casa Blanca para servir a todo el mundo después vinieron los funerales”, confesó a The Post. Cuando la primera dama Jackie Kennedy regresó a la Casa Blanca después, ella le dio uno de sus corbatas, que se apresuró a enmarcar. Murió el 31 de abril de 2010.
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