“La justicia está peor que la cocina”

Nos vemos en un despacho de la editoral de su libro de recetas, que, cuenta encantada, va por la segunda edición. No descarta insistir en la letra impresa, y comenta que le han propuesto escribir de otras cosas, pero que cada uno tiene que hablar de lo que sabe. Sabia reflexión. Su hijo, Pedrito, le ha cambiado la vida, incluso desde el punto de vista de la gula. Se le ha acabado meter mano en toda bandeja o cóctel que se le presente. Ahora come más en casa, lleva más orden. Y ha perdido un montón de kilos.

Pregunta. Licenciada en Derecho, Máster en Bolsa... y acaba en catering y libro de recetas. ¿La cocina cotiza?

Respuesta. No. La cocina está muy de moda y se le ha empezado a dar mucha importancia. A mí personalmente me relaja mucho.

P. Puestos a comprar acciones, ¿de qué guisote aconseja hacerlo?

R. De un risotto. A cualquier hora, con una copa de vino blanco o tinto.

P. ¿El cocido sube o baja en Bolsa?

R. Se mantiene. Es un valor permanente.

P. ¿Come mejor el Santander o el BBVA?

R. Yo creo que el BBVA. Siempre me ha tratado muy bien. Lo digo superpersonalmente.

P. Pues a los ciudadanos nos comen por igual.

R. Desde luego. Los ciudadanos ni pinchamos ni cortamos.

P. ¿Su lema podría ser menos toga y más delantal?

R. Puede ser. El Derecho me gustó mucho estudiarlo, te forma mucho en general. Pero la profesión... Lo intenté, pero me gusta mucho más la cocina.

P. ¿Está mejor la cocina que la justicia?

R. Desde luego. Yo creo que en la justicia en España tiene que haber cambios. Y en la cocina evolucionamos rápido.

P. ¿A qué cocinero reza al pergeñar sus recetas?

R. Yo soy de cocina más clásica, ¿eh? A mí todas esas modernidades de espumas y todo eso, me encanta probarlas, pero no me van. Santi Santamaría me gustaba mucho, por ejemplo.

P. ¿Cuál es su receta más sofisticada?

R. Pues un solomillo asado con salsa de colmenillas. Para hacer bien la salsa hay que deshidratar las setas, pasarlas por un filtro de café ...

P. Tiene más enjundia la colmenilla que el Código Civil.

R. Sí. Es que el Código Civil es coger y buscar, sabértelo mejor o peor. Con las colmenillas hay que ir buscando qué hacer con ellas para la salsa.

Come mejor el BBVA que el Santander

P. De bocata de chorizo y eso, nada, ¿no?

R. A mí el bocata de chorizo con mantequilla es algo que me encanta, ¿eh? Si me oye mi madre, me mata. Y ya si pasas el choricito por la plancha...

P. Este fin de semana se disputan el guiso Chacón y Rubalcaba. ¿Quién de los dos cree que tiene mejor diente?

R. Yo creo que Chacón. Es algo más novedoso. Para todo es bueno el cambio. La veo con más energía.

P. ¿Qué tal tolera su estómago a Rajoy?

R. Bueno, bien.

P. ¿Y a Ana Botella?

R. También.

P. Pues tiene cuatro años para hacer unas digestiones estupendas.

R. Sí, esperemos. Era necesario un cambio sobre todo para dar ánimos a la gente. La situación es muy complicada. A ver qué pasa.

P. ¿Y qué político la lleva al alkaseltzer?

R. Yo creo que ninguno.

P. Come de todo.

R. Me gusta comer casi de todo. Y en la política no hay nadie al que digiera mal.

P. ¿Ser personaje es una cruz?

R. No. Depende de qué tipo de personaje. Yo me considero... no sé. Tengo mi vida y no me asaltan por la calle para preguntarme cosas. La mayoría de la gente no me reconoce.

P. ¿Está más cómoda en los fogones o en las revistas?

R. En los fogones. las revistas me han ayudado a darme oportunidades, no lo puedo negar. Pero, si lo haces mal, no te vuelven a llamar.

P. ¿Qué porcentaje de los habitantes del couché vive del cuento?

R. Yo creo que vive más del cuento toda esta gente que sale diciendo que si ha sido novio de no sé quién. Esto es una vergüenza que no se debía de permitir, que la crónica social de este país sea esta gente que sale de la nada.

P. ¿Cómo se sobrevive a padres como los suyos?

R. Pues intentando absorber lo máximo de cada uno. Mi relación con ellos ha sido básica en mi formación personal y profesional.

P. “Soy un poco machista. Creo que hay cosas que los hombres hacen mejor que las mujeres”. No me diga.

R. Por ejemplo, cargar. Y ocuparse de los coches. Y hay trabajos que hacen mucho mejor las mujeres, como ocuparse de una casa.

P. Con tanta cocina, no se le habrá ido un poco la olla.

R. No. La olla está centrada en el fuego.

P. ¿Le ha perdonado a Michel Meyer el pamelón rojo que le cascó para no sé qué boda?

R. La verdad es que lo elegí yo y me encantó. Al final, a mí un tocadín de una plumita es que se me queda en nada.

P. Desde el punto de vista de la silueta, ¿la cocina ha sido su perdición?

R. Totalmente. No nos vamos a engañar. Totalmente.