Acostumbrados como estamos en este país a las doctrinas de la Santa Madre Iglesia, uno puede pensar que interpretará sus mensajes como Dios manda, por más crípticos que resulten a veces. Pero... el obispo de Tarragona, Jaume Pujol Balcells, ha dejado en sus últimas declaraciones una adivinanza, a saber: "A las mujeres de mi iglesia siempre les digo lo mismo: a quien tienes que cuidar más es a tu marido, él es el hijo más pequeño de la casa. Ya sabéis por qué lo digo". ¡Zape!
Pues yo no lo entiendo. Pero se puede interpretar. ¿El hijo pequeño es el más mimado, al que hay que concederle todos los caprichos, consentirle todos sus desmanes porque el pobre no sabe lo que hace? O sea, que si vuelve tarde y con explicaciones balbuceantes ha de mirársele con cara de 'pero qué travieso que eres, anda, marcha para la cama' y aquí paz y después gloria. El niño pequeño quizá es el más inconsciente y no se le pueden encargar tareas que no podrá desempeñar, véase cuidar a los verdaderos hijos pequeños... "Lo tienen que cuidar, no se puede descuidar", añadió el obispo.
He llamado a un amigo que comparte la fe con el prelado, ambos comulgan con el Opus Dei, por ver si aportaba más luz en este asunto. Y dice que el hombre y la mujer unidos en matrimonio acaban siendo una sola persona, o carne, y por tanto es lo que más hay que cuidar, porque los hijos no son más que un regalo que acaba abandonando el nido para formar otra familia, así que, más vale que el matrimonio se cuide él solito. Y él intrerpreta que lo dicho por el obispo tanto monta que monta tanto para la mujer como para el hombre. Sin embargo, Pujol Balcells solo se lo dice a las "mujeres de su iglesia" y en el templo habrá también hombres, digo yo. En fin, que esta teoría puede ser digerible si no rezumara el clásico machismo de la Iglesia católica (y de todas las demás). El machismo de la jerarquía católica no precisa interpretaciones, es claro como el agua, no tiene pudor ni se anda con tapujos.
Para calibrar el machismo hay una prueba útil e infalible: la homofobia. Así se lo enseñan a los niños desde pequeños: esto es lo que pueden o no pueden hacer los varoncitos y esto es lo propio de las señoritas. Evitan así que los hombres puedan tener comportamientos que les acerquen al mundo femenino, como cuidar a las muñecas, por ejemplo. Y el obispo no ha tirado de adivinanzas cuando ha hablado de los gais: "Su comportamiento no es adecuado ni para ellos ni para la sociedad". Homófobo, luego machista. Así que, que cuiden ellas, al más grande como al más pequeño, llámese marido o hijo. Ahora lo entiendo, señor obispo.
Comentarios
http://nelygarcia.wordpress.com. No nos deberían inquietar los consejos machistas, dados por cualquier religión. Lo importante creo que es buscar el amor y la armonía, en igualdad de oportunidades.
Elena Francis versión Opus Dei . La familia se mantiene porque la mujer aguanta a un hombre inmaduro que hace travesuras y al que ha de cuidar como un niño .. Es rancio e irresponsable. Puesto que el cura es hombre, mejor que se dirija a los hombres a la hora de poner deberes y les diga que mejor que no se casen ni compliquen la vida a nadie, pues no puede ser buen padre el que quiere ser el hijo.
por cierto antes de hacer cualquier artículo se tendrían que informar, no es obispo, es arzobispo.
No se debería hablar de lo que sólo conoce de oídas, y menos aún dar consejos
Es bastante parecido a lo que defienden algunos sectores feministas de como deben comportarse los hombres con sus mujeres. Estas llegan a decir incluso que la unica pruaba aceptable de que un hombre quiere a una mujer es que este renuncie a su propia voluntad y deseos en pro del bienestar de la mujer. Y que todo lo queno sea esto es egoismo masculino.
Al fin y al cabo, la misma $%&€ es...
Por cierto, decir que sin eres homofobo eres machista, es una falacia como un castillo.
A Carmen Morán que más le da la opinión de una persona?Que por cierto es arzobispo, no obispo, cosa que demuestra que esta mujer habla mucho y conoce poco. Habla desde el prejuicio claramente.
Como mujer los comentarios del azorbispo o del obispo, (que eso es custión de diocesis y no de méritos) me da exactamente igual, es una solemne tonteria y nada más. pero si fuera hobre me preocuparía.Porqué la iglesia piensa que yo no soy capaz de cuidarme? Tengo un problema y no llego a la altura que se le supone a una mujer. No puedo ser independiente? No soy nada sin ellas porque me pierdo como un bebe? Desde luego los curas deben saber algo de esto porque ellos vivien solitos sin nadie que les cuide. O quizã el problema lo tienen los maridos y no los hombre solos. en ese caso porque tanto interés en casrlos si luego se vuelven infantiles? Yo en cualquier caso quiero que el hombre sea mi igual, poder confiar en él y basar nuestra unión en un amor adulto y no en un "mi mamá me ama, mi mamá me mima". Señores de la iglesia, aterricen, sus fieles se lo agradeceran
En fin, con la santa madre iglesia hemos topado...otra vez...Sinceramente no se cuando estos señores aprenderán a tener la boca cerrada y dejar de decir sándeces de hace varios siglos...
La homosexualidad no es ni buena ni mala por sí misma. Para un católico será pecaminosa; para un agnóstico, más o menos indiferente en la medida en que le afecte dentro de la sociedad en que vive. Así, el católico no debería imponerse al agnóstico en un estado en el que cada cual es dueño de su existencia; del mismo modo, el agnóstico no puede pretender que el católico cambie su manera de pensar porque, para el creyente, no es al Estado a quien debe la primera consideración de sus opiniones sino a la Iglesia y al Dios que ésta representa.Al parecer, parte del comportamiento homosexual tiene fundamento genético y, en este sentido, no puede ser juzgado más que como un componente más de nuestra común naturaleza humana. De manera que, sí, quien necesita, para satisfacer su líbido, de relacionarse con personas del mismo género, no debería ser juzgado negativamente por un impulso íntimo que va más allá de una simple consideración del sexo como hecho reproductivo. El sentido común lleva a dejar a cada cuál el gobierno de su propia existencia. Si hay hombres a los que satisface la sexualidad con hombres y mujeres con mujeres, allá ellos y ellas en tanto no conculquen las leyes ni molesten el normal desenvolvimiento de la vida ciudadana.El problema viene cuando, por una parte, los homosexuales pretenden imponerse a quienes escandalizan -les gusta "epater aux bourgueoises"- y, por otra, cuando se constituyen en poder fáctico para cambiar las leyes en su beneficio, en contra de la necesidad básica de toda nación: asegurar el relevo generacional. Ser homosexual no debe constituirse en un privilegio, ni adquirir un rango particular de distinción ética o estética. El escritor homosexual será primero ciudadano de un Estado concreto, luego escritor y, por último, incidentalmente, homosexual. No debe haber discriminación, es cierto, pero tampoco privilegio. Y privilegio es, por ejemplo, hacer pasar por matrimonio lo que no lo es; equiparar la sexualidad asexuada a la sexual; y, al cabo, hacer del hedonismo irresponsable el paradigma y fin último de las relaciones interpersonales.Por lo demás, las palabras del obispo pueden muy bien ser interpretadas desde la simple consideración de la vida en pareja como si se tratara de un ser que requiere constante cuidado y especial dedicación. No hay que darle más vueltas.
He escuchado la entrevista y he llegado a la conclusión de que la Iglesia al designar a los obispos tiene muy en cuenta la obediencia ciega y muy poco la capacidad intelectual. Por escasos que sean los sacerdotes no puede ser quer no haya nadie más capacitado en Cataluña para ser obispo que este señor. Ha hablado casi media hora y no ha dicho nada que merezca la pena. Ha abusado de frases infantiles, de recuerdos personales, de párrafos retóricos que no venían a cuento. La entrevistadora le ha forzado a decir algo con cierta sustancia y entonces ha soltado algo tan absurdo como distinguir persona de comportamiento, lo de la maternidad o lo del hijo menor.
Hola, amigos. Yo no sé por qué les hacen tanto caso a los obispos. Aciertan y se equivocan como otro cualquiera y a veces se equivocan más, porque no tienen experiencia en asuntos de casados. La esposa no tiene que cuidar sino de los hijos y mientras éstos no se pueden valer por sì mismos. ¿Cuidar del marido? Muy bien. Lo mismo que el marido tiene que cuidar de la mujer. La tarea de los dos es el amor, cada uno a su manera y a su estilo.Me parece ridículo que a los obispos se les escuche como si fueran los gurús de todo. Solo en cosas de Iglesia y doctrina cristiana, y no en todas ni siempre. Decir que las mujeres no pueden decir misa o confesar como los sacerdotes, es teológicamente discutible. La conducta de los gais puede gustar o no, como otras cosas y no por eso tratamos de prohibirlas. Es parte de la tolerancia y el respeto a la persona. Esa costumbre de que los obispos hablen de todo y les escuchemos como si fueran oráculos, es ridìcula. Anunciar el mensaje de Cristo: esa es su misión. De lo que no sepan hablar, mejor es que se callen. Y si hablan, oídos de mercader. Cordial saludo. Francisco Tostón de la Calle
y dale con sacar punta a las declaraciones... no ha dicho nada malo, sino que en lugar de cuidar de la iglesia o del cura, cuiden de sus maridos... es decir empezar por el que tienes mas cerca... lo mismo les diria si fuesen hombres cuidasen de sus mujeres... normalmente en las misas de entre semana por las mananas hay mas mujeres que hombres (obviamente son personas de media edad o mayores donde la mujer no tenia la presencia que tiene ahora en el mercado laboral), de ahi que dijese de las mujeres que acuden a su parroquia...
Witness, cuantas vueltas para decir que los homosexuales tenemos que tener menos derechos que los demás. Mi matrimonio y mi marido a ti no te incumben, no es ningún privilegio, privilegio sería el tuyo si tuvieses el poder de divorciarnos. Yo tengo un concepto del matrimonio, tú otro. El mio no daña a nadie, el tuyo sólo nos perjudica a los homosexuales. .
Yo creo que simplemente no se debería entrevistar, o dar tribuna a esta gente. Es decir, serán arzobispos, obispos.. o lo que ellos quieran en su comunidad (o secta según se mire, pero eso ya es lo de menos), pero en una sociedad laica no tienen ninguna función señalable, no veo por qué su voz ha de contar más que la mía, o la de cualquier otro.Vamos, que yo creo que alimentamos sus delirios haciéndoles creer , al entrevistarlos y darles cancha, que tienen algún tipo de autoridad en nuestra sociedad.
1. No se debería hablar de lo que sólo se conoce de oídas.2. Menos aún verse com o un niño y querer poner deberes a las otras madres.3. El incesto está muy mal, pero que muy mal ....
Llevan estos señores (los obispos... perdón, los arzobispos) dedicados al santo oficio de desastibilizar gobiernos de izquierda que cuando por fin han logrado su objetivo y se han de dedicar a las tareas propias de su género -perdón otra vez, de su negocio- y tengan que armar un discurso sin el argumentario correspondiente, no es de extrañar en absoluto que les salga su natural altura intelectual un punto más de atrofiada. Demasiado texto para constatar una evidencia, Carmen. Sin embargo, y a juzgar por algunos comentarios, ¡qué necesario sigue siendo este tipo de artículos!
¿Para cuando la ilegalizacion de la iglesia catolica por incumplir la constitucion al discriminar en funcion del sexo a la MUJER?.
Este podía ser un buen consejo del obispo para los hombres: que no se casen y traten de vivir como curas. O si pueden, como obispos. O arzobispos! Coincido con la autora del blog en que la afirmación "A las mujeres de mi iglesia siempre les digo lo mismo: a quien tienes que cuidar más es a tu marido, él es el hijo más pequeño de la casa. Ya sabéis por qué lo digo" - No hay como cogerla. Las mujeres quejándose (con razón) de que se las ha tratado como menores de edad durante gran parte de la Historia, y este arzobispo pretende ahora que nos traten como menores a los hombres, es eso? Desde luego yo no lo acepto, ya tuve y disfruté de mi infancia y de mi madre, a quien añoro mucho pero no pretendo reemplazar. Hay un niño aún en mí (debería haberlo en todos los adultos sanos), pero el adulto que soy lo cuida sin problemas.
Soy católico de base y no suelo estar de acuerdo con la jerarquía. Sin embargo, veo ensañamiento en la interperetación de las palabras de este obispo. Estoy seguro de que si hubiera recomendado a los hombres "que cuidaran de sus esposas", más de alguna feminista habría criticado al obispo "por considerar a las mujeres como seres inferiores que hay que cuidar".En resumen, no veo nada malo en instar a cuidar de tu pareja... Pero claro, el feminsimo está a la que salta.
Y bueno, no hace sino repetir casi a la letra una de las tonterias con que pretendía hacerse el gracioso el fundador del Opus Dei, su "padre" espiritual. Así son estos, repiten como loros lo que decía el santo marqués.
Papis, que el arzobispado es solo cuestión de rango, no un grado del sacramento del Orden. Este impresentable es arzobispo porque gobierna una sede metropolitana, por lo demas es tan obispo como cualquiera
El que está a la que salta eres tú. Y escribes sesgado.Aquí no hay niño ni niña consentido que valga. Y la gente empieza a estar harta de que hablen de oídas y de que pongan deberes a los demás, vale !
Sr Falacioso, no sé a qué viene esa pátina de extrema ira en cada una de sus palabras. Hagáselo mirar.
Oriano, es que lo que molesta no es quién sea el cuidador o el cuidado, sino el hecho de que se quieran asignar determinadas "funciones" así porque sí según lo que uno/a tenga entre pierna y pierna. Pero vamos, que yo creo que no hay ni que darse por aludido/a con estos señores porque hablarán para sus fans, digo yo. A mí me importa bien poco lo que piensen. Lo que ya me incordia más es que tengamos que pagar estos anacronismos entre todos.
Eva, gracias por tu tono conciliador. 1 abrazo.
... tu marido, él es el hijo más pequeño de la casa. Ya sabéis por qué lo digo ... Hombre, los niños saben que son niños y se dejan educar siguiendo a los mayores. Si la educación es buena se les pone límites y no se les cría como el rey de la casa, algún día crecen se valen por si mismos y se emancipan.Está claro que no habla el cura de eso sino de los DEBERES de la mujer con el marido y, más concretamente, de las obligaciones de aguante y tolerancia que son las que se tienen con los hijos, pasando por alto errores y demás mientran crecen .... P A T E T I C O eso de una mamá en casa que perdona al gamberro .... No tiene mujer, sólo madre el arzobispo, pero como muchos hablan de lo que no saben y han de decir a las mujeres lo que tienen o no que hacer. Ese "maternalismo" no es igualdad, aunque trate a los maridos de críos malcriados. De manera Oriano que da igual que diga que la mujer debe cuidar del niño como que el hombre ha de cuidar de la niña. El mesaje es que la mujer ha de aguantar el matrimonio aunque el marido sea incapaz. Por cierto, sólo los niños llegan a arzopispos en ese clan. A las que pueden ser madres no se las considera capaces
La cúpula de la Iglesia Católica se ha quedado retrasada en el tiempo y fuera de alcance con la gente.
Entendieron su función sacerdotal como una norma social con políticas terrenales, desvinculándose del fundamento religioso que solo debe ser ejercer la enseñanza del Evangelio.
Así se han ido alejando de la gente que ve en ellos unos a advenedizos en política que utilizan la función religiosa para obligar al personal a vivir según su visión teórica de la vida.
Quieren cortar el bacalao como hacían antaño desde el palio del jefe del estado, sin discusión ni cortapisas, obligando y exigiendo.
Vivid como yo digo pero no hagáis lo que yo hago.
Y hoy nadie les presta atención.
y quién me cuida a mi?
y aun se extrañan,que la gente pase de la Iglesia.Vergüenza deberia de darle a este personaje, decir estas cosas.Pero claro como no tiene ni idea de lo que habla,lo dice y se queda tan pancho.A saber:
-Matrimonio,esposa sometida al marido
-Homosexualidad: Segun el, es una enfermedad.
-Mujer:Mera reproductora y cuidadora del hogar.
Lo peor de todo es la intolerancia que se desprende de su discurso,es decir,ni conozco ni quiero saber.Esto es asi por dogma de fe.Ostia claro si es la Iglesia,en eso se basa.En creer por huevos en un cuento que nos enseñaron de pequeños
Lo que ha dicho el obispo resulta evidente para cualquier persona que no tenga prejuicios y que tenga un mínimo de buen corazón:
1. Que la mujer ha de cuidar del marido con ternura.
2. Que una cosa es la persona homosexual (en sí misma buena) y otra cosa son las relaciones homosexuales (que no son tan buenas, sean realizadas por quien sea, homosexuales o no).
Pues tal como está el patio aquí y en el mundo, gracias en parte a las religiones .... (muertas, humilladas ...) más le valdría predicar a los maridos eso que dices. Peroo me temo que lo que le importa es que haya alguien que "aguante" Y eso lo entiende cualquiera con un mínimo de inteligencia y conocimiento de la historia
Ivanov: supongo y espero que estés de coña.En caso contrario: ¿Quién define las acciones que son buenas? ¿tú, el obispo? ¿en función de qué? Porque POR SUPUESTO que no tenéis ningún prejuicio, claro
Normalmente cuando un obispo habla de la bondad de una acción, es decir, desde un punto de vista moral, se refiere a su adecuación con respecto al fin último del ser humano, que es llegar a conocer directamente a Dios y por tanto a amarlo totalmente.
Habla de oídas sobre lo que han de hacer otros (en este caso, otras) y, en último término, de lo que habla es de lo no se sabe ni si existe
"Amaos los unos a los otros como yo os he amado".
Coincido con lo que he leído más abajo sobre que es demasiado el texto del artículo para constatar la evidente posición de la iglesia católica sobre algunos temas y suscribo que se procure no darle cancha a estos aconsejadores de lo anacrónico. Creo que lo que procede es impedir que estos déspotas machistas ultramontanos sigan recibiendo millones de euros de las arcas públicas mientras estan permitiendo que la parte del patrimonio público del que son propietarios y por el que reciben un montón de dinero sencillamente se desmorone. Por no decir la cancha que ese mismo dinero público les proporciona para predicar su misoginia y su concepto paternalista de la relación de pareja en las escuelas españolas. ¿Quiere algún gobierno del signo que sea abordar de una vez este tema? Que en estos momentos terribles para nuestro país nos permitamos e lujo de financiar a esta gente me parece de una injusticia que algún día la historia nos demandará como país.
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