Cuatro muertos en Onda en un coche arrastrado por una tromba

Cuatro personas han fallecido, entre ellas un niño de seis o siete años, al ser arrastrado el vehículo en el que viajaban por una tromba de agua a su paso por el río Seco, en el camino Betxí a Onda, en la localidad de Onda (Castellón).

Según ha informado la subdelegación del Gobierno de Castellón, el suceso ha tenido lugar alrededor de las 17.30 de hoy, pero el coche no ha podido ser localizado hasta minutos antes de las 19.00. Los fallecidos son la conductora del coche, de 41 años, su hijo, de seis o siete, su padre, de 81 y su madre, de 78.

Las víctimas quedaron atrapadas en el vehículo, que quedó completamente cubierto por el agua del río Seco. El coche solo ha podido ser localizado por los bomberos cuando ha bajado el nivel del agua. Cuando la conductora intentó cruzar por una zona del río Seco, se vio sorprendida por una crecida muy rápida del agua. Hasta el lugar del suceso se desplazaron efectivos de los parques de bomberos de Nules y Onda, así como una unidad de rescate subacuático.

Según el presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, la conductora intentó contactar con su marido y con Emergencias mientras el vehículo era arrastrado por el agua al menos 250 metros. El alcalde de Onda, Salvador Aguilella (PP), ha decretado tres días de luto oficial. Según ha informado Aguillela en rueda de prensa, los fallecidos son la conductora del coche, A.A.M.S., de 41 años, su hijo A.S.M. de 6 años, su padre M.M.G. de 81 años y su madre J.S.C. de 78 años. El marido de la fallecida y padre del menor ha sido informado de lo sucedido por el alcalde de Onda e inmediatamente después ha sido atendido por un equipo de psicólogos.

Aguilella ha señalado que la primera llamada de emergencias se ha producido a las 17.50 e informaba de que un Peugeot 206 había sido arrastrado por el agua al tratar de cruzar el río Seco.

La muerte de estas cuatro personas es el suceso más grave con víctimas mortales a causa de las lluvias en la última década. El trágico accidente se ha producido en una jornada de intensas lluvias, especialmente en la provincia de Castellón. Las lluvias han dejado acumulaciones de hasta 102,7 litros en cinco horas en Vinaròs (Castellón) y han obligado a cortar dos carreteras locales, la CV-135 y la CV-140, cerca de Benicarló, según fuentes del Centro Meteorológico de Valencia y del Centro de Gestión de Tráfico. Asimismo, una tercera carretera se ha visto también afectada, la A-23 a su paso por Gilet (Valencia).

En las últimas cuatro horas de la mañana se han registrado precipitaciones acumuladas de 55 litros por metro cuadrado en Manises (Valencia), de 36 litros en Algar de Palancia (Castellón), de 35 litros en Alcúdia de Veo (Castellón) y de 32 litros en Onda (Castellón). Una tromba de agua caída en la localidad valenciana de Chiva ha dejado precipitaciones acumuladas de 32 litros por metro cuadrado en apenas una hora.

Las provincias de Valencia y Castellón permanecen este domingo en alerta naranja por precipitaciones intensas y abundantes que podrían acumular más de 40 litros por metro cuadrado, según la Agencia Estatal de Meteorología.

Tornado en Sueca

Aparte de las trombas de agua en el norte de la Comunidad Valenciana, destaca un tornado que se desencadenó poco antes del mediodía en Sueca y ha afectado a varias naves industriales ubicadas entre el Instituto de Educación Secundaria Joan Fuster y la vía del ferrocarril, informa Josep Blay. En una de ellas arrancó parte del techo formado por planchas metálicas.

El vendaval las desplazó a decenas de metros de distancia. Una de ellas superó la doble vía férrea y cayó, a un centenar de metros, sobre un vehículo estacionado en la calle Camí dels Dos Pontents. El ciclón rompió ramas de árboles, arrancó señales de tráfico y elevó por el aire contenedores. La tormenta dispersó por gran parte de la población materiales de fibra y poliuretano de los que se utilizan para los aislamientos de los tejados. Muchos de estos restos abundaban en la cercana ronda de Bernat Aliño mostraba un aspecto.

En otras zonas de la población, distantes a un kilómetro aproximadamente de las fábricas afectadas se podían observar pequeños pedazos de fibra. Todo parece indicar que el tornado llegó a la población por el este, desde la partida de Les Sendroses, zona en la que existen casitas de campo que no se mostraban dañadas. La Policía Local y la Guardia Civil se personaron en el foco afectado poco después de desencadenarse el vendaval. Los servicios municipales procedieron a la retirada de la vía pública de cuanto había esparcido la tormenta. La lluvia ha sido también, con toda probabilidad, la causa de un accidente que se ha cobrado dos víctimas mortales en Riba-roja (Valencia).

Un turismo y un monovolumen han chocado de frente y los ocupantes del coche han fallecido, según los bomberos, que han tenido que excarcelarles tras intentar estabilizar a uno de ellos, que al final también ha fallecido.

Los políticos animan

Pese a las condiciones metereológicas adversas, la participación en la Comunidad Valenciana ha sido la mayor del país hasta las dos de la tarde, con 45,2%, frente al 36,54% de media del Estado. En las últimas elecciones, a esas horas habían votado el 47,5% de los valencianos con derecho a voto. Y ante las adversas condiciones meteorológicas, los políticos han animado a los valencianos a ir a votar.

Así, el secretario general del PSPV-PSOE, Jorge Alarte, ha hecho un llamamiento a los valencianos para que a pesar del tiempo y de la lluvia vayan a ejercer su derecho al voto en unas elecciones que, a su juicio, son "importantes para el futuro de España". Por su parte, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha manifestado que la lluvia no tiene que impedir que los ciudadanos ejerzan su derecho a voto y les ha animado a acudir a votar "por el futuro de todos los españoles" aunque caigan "chuzos de punta". "Es día para mojarse" y de acudir a votar "dentro de la tormenta en la que se encuentra España" para decidir "el futuro de todos", ha manifestado, por su lado, el cabeza de lista del PP por Valencia, Esteban González Pons, que ha votado en Valencia cuando descargaba una tormenta. El propio presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ha acudido a votar en Castellón protegido por un paraguas.