En 2011, 'El País Semanal' se acercó a algunos de los lugares donde ETA cometió sus atentados. Era un homenaje a las más de 800 víctimas del terror. Mostraba 40 espacios donde la banda dejó su huella más terrible. Portales, bosques y carreteras en los que hoy no se percibe el rastro de la muerte. Captados a la hora exacta del atentado. Y en la misma fecha. Pero años después. Un álbum de ausencias que completaron con su testimonio familiares y amigos de los asesinados. Una cicatriz invisible, pero muy presente. Un ejercicio de memoria sobre el que también reflexionaban 25 personajes públicos del momento.
“Podría marcar con tiza el sitio dondeyacían mi padre y sus compañeros”.Joaquín Carrasco, hijo de Manuel Carrasco, trabajador de la Armada. Murió asesinado junto a Santiago Esteban, José Ramón Intriago, Florentino López, Félix Ramos y Martín Rosa el 11 de diciembre de 1995 en la calle de Peña Prieta de Madrid. Eran las 15.00.Eduardo Nave“Recuerdo el fogonazo. La sensación de aturdimiento. El cabo que iba de copiloto se cayó a mis pies. Cogí la pistola. Y salí corriendo por la calle de Juan Bravo”. Jesús Faucha, de 52 años, sobrevivió al atentado con coche bomba en el que murieron los guardias civiles Alberto Amancio Alonso, Juan José Catón, Vicente Javier Domínguez, Juan Carlos González y Juan Mateos, el 25 de abril de 1986, en el cruce de la calle de Juan Bravo con Príncipe de Vergara de Madrid. Eran las 7.20.Eduardo Nave“Ocurrió a una manzana de mi antigua casa. Procuro no mirar. Doy un rodeo, prefiero ir por otras calles. Siento necesidad de escapar”. Conchita Martínez, de 56 años, viuda de Pedro Antonio Blanco, teniente coronel del Ejército de Tierra, asesinado el 21 de enero de 2000 en la calle de la Pizarra, en Madrid. Eran las 8.10.Eduardo Nave“Ni olvidamos ni perdonamos. El dolor de unos padres no tiene medida”. Luis Ortiz. Padre de Luis Ortiz, policía nacional asesinado el 10 de julio de 2001 en la calle de Ocaña de Madrid a las 20.45.Eduardo Nave“Cuando paso por esa calle, veo a la familia de Isaías Carrasco empapada de sangre. No voy a borrar ese recuerdo”. Rafaela Romero, portavoz del PSE-EE en las Juntas Generales de Gipuzkoa y amiga de la familia de Isaías Carrasco, asesinado el 7 de marzo de 2008 junto a su casa, en la calle Navas de Tolosa, en Mondragón (Gipuzkoa). Eran las 13.30.Willy Uribe“Solo estuve una vez, a las tres semanas de ser asesinado mi hermano. Lo hice por mi madre. Se empeñó en ir. Fue la primera y la última. Juré no volver”. María del Mar Blanco, hermana de Miguel Ángel Blanco, concejal del PP en Ermua (Bizkaia). Le encontraron herido de muerte el 12 de julio de 1997, a las 16.50. Los terroristas lo abandonaron con dos disparos en la cabeza y maniatado en este bosque de Lasarte-Oria (Gipuzkoa).Eduardo Nave“No he vuelto nunca. No soportaríaestar en ese bar. ¿Para qué entrar ahí?”. Ana Iríbar, viuda de Gregorio Ordóñez, diputado del PP en el Parlamento vasco y teniente de alcalde de San Sebastián, asesinado el 23 de enero de 1995 de un tiro en la cabeza mientras almorzaba en el bar La Cepa, en la parte vieja donostiarra. Eran las 15.30.Willy UribeA las 8.45 del 26 de junio de 1985, el cartero Estanislao Galíndez, de 63 años, fue asaltado frente a este caserío de la calle Mendiko, en Amurrio (Álava). Se dirigía a la oficina de correos en bicicleta. Le mataron de tres disparos.Eduardo Nave“Salvé la vida por décimas. Dormía justo donde el coche bomba abrió un boquete en el muro. Recuerdo los gritos de mis compañeros cuando explotó”. Juan Antonio Martín, guardia civil herido en el atentado que costó la vida a Jaime Bilbao, de 38 años, y al niño de dos años Luis Delgado. Ocurrió el 22 de noviembre de 1988, a las 23.57, junto a la Dirección General de la Guardia Civil en Madrid.Eduardo Nave“Cada vez que paso por ahí suspiro. Estos canallas destrozaron a mi hijo” Pedro Ricondo, de 82 años. Padre de Antonio Ricondo, asesinado junto a Eutimio Gómez y Julia Ríos el 19 de febrero de 1992 en este cruce de la calle de la Albericia con la calle de Lavapiés, en Santander (Cantabria). Eran las 20.10.Eduardo Nave“Cruzo por el lugar y desvío los ojos,pero no la cabeza. No sé lo que siento. No es odio, ni rabia”. Pablo Broseta, de 46 años, hijo de Manuel Broseta, catedrático de Derecho Mercantil, asesinado el 15 de enero de 1992 en los jardines de la avenida de Vicente Blasco Ibáñez, Valencia, a las 10.15.Eduardo Nave“En esta foto veo lo que se le escapa a la cámara. Cinco familias rotas esperando justicia”. Araceli Prieto, de 70 años, viuda de Emilio Domingo Tejedor. Murió asesinado junto a sus compañeros militares Juan Antonio Núñez, Ramón Carlos Navia, Antonio Ricote y Francisco Carrillo el 6 de febrero de 1992 en la plaza de la Cruz Verde, Madrid. Eran las 8.35.Eduardo Nave“Nunca hemos vuelto. Fue un dolor terrible. De los vascos no queremos saber nada”. María del Carmen Herrero, de 59 años, hermana de Moisés Cosme Herrero, inspector dePolicía. Fue asesinado el 26 de mayo de 1985 en la calle de Martikoena, número 6, en Getxo (Bizkaia). Eran las 12.20.Eduardo Nave“Se me oprime el cuerpo cuando paso por allí. No se lo deseo ni a ellos”. Antonio Salvá, padre de Diego Salvá, guardia civil asesinado el 30 de julio de 2009, a las 13.50, en Calvià (Islas Baleares). Junto a él murió su compañero Carlos Enrique Sáenz de Tejada. Fue el último atentado con muertos en España.Eduardo Nave“Mi hijo tenía 14 meses. Se le vino la ventana encima. Las cicatrices no se le han borrado. El solar donde estaba la casa cuartel sigue vacío. Como un fantasma”. María José Roscales, de 46 años, madre de herido en el atentado contra la casa cuartel de Vic (Barcelona). En la calle de Andreu Ferrer murieron el 29 de mayo de 1991 Juan Chincoa, Francisco Cipriano Díaz, Maudilia Duque, Ana Cristina Porras, María Pilar Quesada, Nuria Ribó, Rosa María Rosa, Vanessa Ruiz y Juan Salas. Eran las 19.30.Eduardo Nave“No hay ninguna placa. Lo prefiero así: un lugar anónimo, aunque no para nosotros”. Manuel Giménez, de 33 años, hijo de Manuel Giménez Abad, presidente del PP de Aragón,asesinado el 6 de mayo de 2001,cuando se dirigía al fútbol, en la calle de las Cortes de Aragón, número 9 (Zaragoza). Eran las 18.20.Eduardo Nave“Bajé a la calle y le vi muerto a 15 metros. Le reconocí por sus zapatos”. El socialista Fernando Buesa y su escolta, el ‘ertzaina’ Jorge Díez, atravesaron este paso de cebra y murieron sesinados, 300 metros más adelante, por un coche bomba. Eran las 16.38 del 23 de febrero de 2000. Begoña Elorza, madre de Jorge, escuchó la explosión desde su casa: “Bajé a la calle y le vi, a 15 metros, muerto. Le reconocí por sus zapatos. A veces vuelvo al lugar donde le mataron. Cuando lo hago, mi cabeza recuerda todas las imágenes”. Natividad Rodríguez, viuda del político socialista, pasa a diario por el mismo sitio: “Está camino de casa al centro de la ciudad. Paso por él cada día. A veces hay situaciones desagradables. Nos encontramos pintadas y pegatinas en el monolito de recuerdo. Con eso vivimos aquí”.Willy Uribe
