Desalojadas 1.000 personas por un incendio en Ibiza

Más de mil personas han pasado la noche fuera de sus casas en Ibiza, tras ser desalojada por la amenaza real de un gran incendio forestal declarado al anochecer del domingo en las inmediaciones y zonas interiores de las urbanizaciones de Roca Llisa, con 800 viviendas. Una parte de los afectados fue alojada en un polideportivo. Durante la noche y la madrugada, el fuerte viento arrasó montes de pinares, sin control, en Santa Eulàlia, entre Sol den Serra, cerca de Cala Llonga, Puig des Moltons y Cala Molí. Es un siniestro de nivel 2 de emergencia, según el plan especial de riesgos porque se da una "amenaza de manera grave y colectiva a personas y bienes". Algunas casas quedaron afectadas, según un portavoz municipal de Santa Eulàlia pero no se tenía constancia de personas heridas.

Ibiza está en llamas por segunda vez en esta temporada. A finales de mayo la isla ya padeció un enorme fuego en la sierra de Morna en Sant Joan que asoló unas 1.500 hectáreas. Las rachas cambiantes de fuerte viento, durante la pasado noche, esparcieron las llamas por las copas de los pinos y los arbustos impulsadas. Las ráfagas de tramontana fueron de hasta 70 kilómetros por hora y siguen esta mañana a más de cincuenta kilómetros, según los servicios meteorológicos. A dos decenas de kilómetros, en la isla de Formentera, llegó el olor a chamusquina, según manifestaron sus vecinos en las redes sociales. Las imágenes nocturnas mostraban frentes de fuego que coronaban las sierras y valles al norte de la capital de Ibiza. Las laderas estaban repletas de puntos con brasas encendidas en la oscuridad.

A medianoche, cuatro horas después del inicio del siniestro, se decretó el desalojo de la urbanización de Roca Llisa, una zona de lujo cercano al golf del mismo nombre, entre la capital y Santa Eulàlia. Las primeras llamas comenzaron cerca de la carretera de Cala Llonga a la playa Sol d'En Serra según los datos aportados por el departamento de emergencias. El primer aviso se recibió tras el ocaso, a las 20.15. Medio centenar de ciudadanos alertó a los servicios del 112. Cientos de personas observaron expectantes como el fulgor de las llamas perfila las laderas de los montes próximos. Los foros sociales recogían testimonios de vecinos indignados y de algún propietario extranjero que solicitada datos concretos desde su país.

Los efectivos aéreos se incorporan a las tareas de extinción con la primera luz del día que permite las tareas de extinción, con el vuelo y las cargas de los hidroaviones y helicópteros en el mar y piscinas. De madrugada empezaron tareas concretas en zonas de gran riesgo una primera brigada de la UME (Unidad Militar de Emergencias) desplazada adrede desde Valencia. Este lunes a las 9.00 y 12 horas dos barcos parten del puerto de Valencia, con 34 militares y seis autobombas, el primero y 150 militares y seis autobombas el segundo. Defensa espera situar en Ibiza a 200 efectivos. Por la gravedad del incendio, 50 soldados de Valencia y otra de Zaragoza están en alerta.