Rajoy promete "hablar" con los bancos para que ayuden a salir de la crisis

En el cierre del foro sobre el empleo que tuvo como estrella invitada a Rodrigo Rato, presidente de Bankia, Mariano Rajoy cumplió el pronóstico y fue mucho menos concreto que los demás participantes. El líder del PP apuntó algunas líneas, pero sin rematar prácticamente ninguna. En uno de los puntos que reconoció como clave, el de recuperar el crédito, se limitó a señalar: "Hace falta crédito, porque sin dinero no hay empleo. Hay que hacer algunas cosas. Las entidades financieras deben asumir su responsabilidad en la salida de la crisis. Habrá que hablar con ellos a fondo y discutir y ver qué se puede hacer, porque también ellos tienen sus problemas, sobre todo de morosidad. Garantizo que el PP hablará con los bancos y que de ese diálogo saldrán soluciones". Rajoy criticó mucho en su momento la propuesta del PSOE de un impuesto a los bancos para crear empleo con el dinero recaudado.

En esta línea de lanzar ideas sin rematarlas, a pesar de que se trataba de uno de los cuatro foros programáticos con los que el PP quiere difundir qué plantea para recuperar la economía, también apuntó cuestiones de la reforma laboral que tiene en la cabeza. Primero prometió austeridad en su administración -"no se puede crear empleo si no hay austeridad", dijo- y después criticó la última reforma laboral del PSOE porque, dijo, sanciona la temporalidad como norma. Tuvo un lapsus que demuestra que su cabeza, como dicen muchos en su entorno, ya está en La Moncloa: "La próxima semana debatiremos la reforma en el Consejo de Ministros... en el Congreso de los Diputados", dijo. La gente empezó a reír. "Aunque no era intencionado tampoco es tan exagerado", remató.

Rajoy dice que el principal objetivo debe ser crear empleo fijo. Para ello, se limitó a apuntar líneas: "Hay que simplificar la tipología de los contratos laborales, y eliminar como norma la temporalidad, aunque tiene que haber algunos contratos temporales. Y además, que cada cosa se negocie en el ámbito sectorial o territorial más eficaz. Pero las grandes decisiones salariales se deben tomar dentro de las empresas, porque cada empresa es distinta. Además hay que hacer un marco laboral "para autónomos y microempresas". En algún momento en los últimos meses, Rajoy habló de contrato único y de eliminar los convenios provinciales; ahora no llega tan lejos. En cualquier caso la intención es dar más poder a los empresarios para negociar posibles bajadas de sueldos cuando hay problemas sin la limitación de un convenio sectorial que fija un mínimo de incremento salarial. Ni siquiera entró al asunto planteado el día anterior por Rato, esto es la revisión de toda la estructura salarial -se entiende que para hacer una rebaja ante la crisis- y la vinculación de salarios y productividad.

También en asuntos de impuestos, ahora en pleno debate, fue muy inconcreto. En materia fiscal, la prioridad será ayudar a los que puedan crear puestos de trabajo". Se movió más en el terreno de la retórica: "El paro es un drama. Si los españoles que hoy no pueden trabajar, casi cinco millones, encontraran trabajo sería muy bueno para ellos y para el conjunto de los españoles. Sería muy bueno que dos, o tres, o cientos de miles o millones pudieran trabajar. Supondría un enorme ahorro en el seguro de desempleo. Mucha más gente pagaría impuesto de la renta. Tendrían dinero, consumirían y recaudaríamos más por IVA. Podríamos mejorar los servicios. Cotizarían a la seguridad social, podríamos mejorar el sistema de pensiones. A los empresarios les iría mejor y pagarían más impuestos. Tener trabajo es lo mejor para todos".

Por último, recordó que el PP cogió el Gobierno con un 20% de paro y cuando lo dejó estaba en el 10%. Ahora vuelve al 20%. No se comprometió del todo a bajarlo otra vez al 10%, pero sí apuntó: "Nosotros fuimos capaces de gobernar en situaciones complicadas. Hay una senda de salida, la conocemos, la hemos recorrido antes, podemos volver a hacerlo, debemos iluminar ese camino de salida de la crisis, eso es lo que dará confianza, lo haremos con seguridad y sin riesgos. Reformas y concordia es lo que promete el PP".