Portabella es partidario de "quitar grasa" a la administración pública

Jordi Portabella ha asegurado hoy que hay que "quitar grasa" a la administración para hacerla más eficiente, y cambiar su "visión corporativista". El candidato de la coalición formada por Esquerra, Reagrupament y Democràcia Catalana no apuesta por reducir el personal, pero si por reestructurarlo para adaptarse "a las nuevas necesidades". A su vez, ha defendido que, durante la próxima legislatura, no debe haber un crecimiento del número de empleados de la administración pública de Barcelona.

Hace poco más de un mes, la secretaria de Administración y Función Pública de la Generalitat, Pilar Pifarré, utilizó los mismos términos para cuestionar el trabajo de entre 15.000 y 20.000 empleados públicos por dedicarse a labores burocráticas que juzgó "innecesarias". Fue desautorizada de inmediato por la vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega, quién si afirmó que dichos trabajadores se encontraban "desubicados".

En su primer acto de campaña, y flanqueado por los principales candidatos de la lista por Barcelona, Portabella ha insistido en la que es su propuesta estrella en esta campaña, la creación de 50.000 puestos de trabajo. Tras almorzar con un grupo de emprendedores, el alcaldable ha insistido en que la administración debe "apoyar y empujar" aquellas iniciativas que faciliten la "reindustrialización de Barcelona".

"La administración no puede ser una barrera" para estos proyectos, sino que tiene que "crear un entorno favorable" para su desarrollo. Entre otras propuestas, Portabella quiere que el ayuntamiento facilite el acceso a un capital que permita iniciar proyectos y consolidar los ya existentes.

Con los terrenos que ocupará el campus interuniversitario Diagonal-Besós como telón de fondo, conocido como b_TEC , también ha dicho que "el conocimiento tiene que ser el eje vertebrador" del futuro de Barcelona, y que la capital catalana debe ser, a su vez, la impulsora del crecimiento en el área metropolitana. También se ha referido a la polémica entorno al inicio de campaña de los socialistas, en la que los bomberos se manifestaron. "Los últimos años ha habido conflictos lesivos para la ciudadanía", para a su vez defender que hay que negociar sin ceder pero sin "negar" todo cambio.