Condenados a 114 y 39 años los etarras que asesinaron a dos policías y una embarazada en 1983

La Audiencia Nacional ha condenado a los etarras Félix Ignacio Esparza y Manuel Inciarte a 114 y 39 años de prisión, respectivamente. Ambos han sido declarados culpables de los delitos de atentado, detención ilegal y sustracción de vehículo. A Esparza los magistrados también le han declarado autor de un asesinato en concurso con aborto y de intento de homicidio.

La mañana del 4 de mayo de 1983, Esparza, Inciarte y otros cuatro miembros del comando Vizcaya -Enrique Letona,Enrique Iztueta, José Félix Zabarte y Sebastián Echaniz, se dirigieron al garaje del policía Julio Segarra con la intención de secuestralo. Cuando ya estaba amordazado apareció el cabo Pedro Barquero junto a su esposa, Dolores Ledo, embarazada de seis meses. Éste se dispuso a ayudar a su compañero cuando Enrique Letona, uno de los etarras, ya condenado, descerrajó un tiro a quemarropa a Segarra, que permanecía atado. Mientras, Esparza e Iriarte comenzaron a disparar sobre Barquero y su mujer, que recibieron cuatro y tres balazos, respectivamente. Cuando ya estaban malheridos en el suelo, Esparza se acercó a ellos y los remató. Los cuatro huyeron en un R-12 robado.

Esparza integró en 1981 el comando Baratza y hasta 1989, año en el que huyó a Francia, participó en más de una veintena de atentados. Luego se trasladó a Sudamérica donde estuvo en la reserva de terroristas de ETA hasta que volvió a ser recuperado por la banda para cuestiones logísticas. Después de permanecer escondido en el sur de Francia se trasladó a Sudamérica donde residió en varios países. Formó parte de la reserva de terroristas de ETA hasta que fue recuperado por la dirección de la organización para encargarse de cuestiones relacionadas con el aparato logístico, cuya dirección pasó a asumir en 2001, fecha en la que se incorporó al comité ejecutivo de la banda. Tres años más tarde fue detenido y en abril de 2010 fue extraditado a España desde el país galo.

Inciarte, conocido como Jeremías, fue detenido en 2009 cuando aterrizaba en el aeropuerto de Barajas, procedente de México, donde residía desde 1996 y de donde fue expulsado cuando un denunciante anónimo reveló a las autoridades su pasado terrorista. Inciarte presuntamente participó en el asesinato del inspector del Cuerpo Superior de Policía Moisés Cosme Herrero, el 26 de mayo de 1984, en el ataque a la comisaría de San Ignacio de Bilbao y al del cuartel de la Guardia Civil de las Arenas (Vizcaya), el 19 de agosto de 1984, en el que una niña resultó gravemente herida.

La Fiscalía pedía para ambos 101 años de cárcel.