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La importancia de llamarse...

Yolanda Monge

“Cariño, estamos embarazados” es una noticia –en este blog asumimos que buena y deseada- que inevitablemente desemboca en millones de sueños, expectativas y preguntas –no todas con respuesta. ¿La primera que deberá ser contestada en el plazo máximo de nueve meses? El nombre del futuro bebé.

Nota: como siempre, hay excepciones, recuerdo haber leído un libro de Henning Mankell donde el protagonista tenía una nieta que ya había cumplido un año sin nombre porque los padres no se decidían por ninguno… Pero aquello era ficción... -¿o no?-

Dar nombre a un hijo es la primera decisión oficial que toman los padres por ese bebé. Y a juzgar por los estudios, la industria y la experiencia cotidiana, no se deja a la ligera. Esto es Estados Unidos y aquí existe un experto y un consultor para todo. Abundan las webs; proliferan los volúmenes sobre nombres de niños y niñas en las librerías; y he visto a más de una embarazada consultando pensativa con el ceño fruncio la Aplicación de su Iphone al respecto (hay decenas de ellas, aplicaciones).

El asunto lo abordan con mucho sentido del humor aunque el transfondo socioeconómico es muy duro los autores del super ventas Freakonomics, Steven Levitt y Stephen Dubner, libro ahora convertido en película. Millones de padres creen que el nombre que otorguen a su hijo condicionará su vida o lo que es lo mismo: existe un determinismo nominal que dicta la vida, exitosa o no, del recién nacido.

Captura de pantalla 2010-12-14 a las 12.29.05 p.m.Parece ser que no es lo mismo llamarse ‘Unique’ -nombre del que la población negra de EE UU tiene hasta 228 variantes- que llamarse ‘Amy’-nombre preferido entre las clases pudientes blancas- aunque a la vista de los datos aportados por un profesor de Harvard la elección del primero –a pesar de lo que entraña de ‘único’- es un claro síntoma de que se vive en la pobreza y la marginación.

Roland Fiver –joven economista negro cuyo futuro no era muy prometedor pero que derrotó las duras condiciones sociales y económicas en las que creció- dedica su cátedra al estudio de los logros -más bien fracasos- de la población negra en una época muy distinta a la de la segregación racial pero con grandes barreras todavía por superar y enormes bolsas de pobreza

En opinión –apoyada con datos- de Fiver, los padres negros dan a sus hijos nombres muy diferentes a los que les dan los padres blancos porque buscan la diferencia. “El nombre lo es todo”, dice Tyrone Howard, joven consultado para este post. “El nombre te hace ser el rey, te hace ser un perdedor o un ganador”. Pues bien, Tyrone vive en una de las zonas más deprimidas y peligrosas de la ciudad de Washington y las estadísticas dicen que no alcanzará la esperanza de edad que en este país roza los 78 años.

Captura de pantalla 2010-12-14 a las 12.11.37 p.m.DeShawn, Malik y Reginald están dentro de los 20 nombres más usados por la población negra para chicos. Para chicas son: Imani, Ebom y Precious. Los blancos llaman a su hijos Jake, Connor o Lucas; y a sus hijas Molly, Heather o Emily. La pregunta que se hacen los autores de Freakonomics es: ¿cómo afecta al resto de la vida de un niño el tener un nombre blanco o un nombre negro?

Según un estudio, si DeShawn Williams y Jake Williams -por ejemplo- mandan el mismo -idéntico- currículum vitae a las mismas empresas, Jake Williams tiene una probabilidad muchísimo más alta de ser llamado para una entrevista y finalmente contratado. Los nombres "que suenan a negro" tienen una penalización social y económica. ¿Terrible, no?

Supongo que cada uno de vosotros que leéis este blog tiene una historia que contar sobre el nombre de su hijo o su hija. Yo la tengo sobre mi enano y es muy sencilla. Pero os la cuento otro día.

Comentarios

Buenos días a todos los que lean este comentario. El nombre de mi hija - CARMEN - viene de su abuela paterna. Mi marido "quería más" un niño, con deciros que cuando nos dijeron el sexo de la nena soltó inmediatamente:"Ahora sí que tenemos que ir a por el segundo" ¡¡¡¡Y CARMEN AÚN NO HABÍA NACIDO!!!!. Así que cedí y le pusimos el nombre de su madre, porque tambien me gustaba, claro, si se hubiera llamado Eustaquia o Filomena, lo habría llevado claro. Estoy de acuerdo con que según de las ideas políticas o clase social que seas le vas a poner a tu hijo un nombre y otro: ¿por qué si no abundan las "Cayetanas" o los "Rodrigos" (lease el grandioso Cid Campeador) entre los pijos y gente de derechas o los nombres como "Sheila" entre los gitanos?. Quizá este comentario suene racista pero es la pura realidad, y lo dice una persona que ha trabajado en un Registro Civil. Saludines a todos.
algunos padres son muy egoistas y ponen a sus hijos nombres ridiculos o extravagantes, y luego esos hijos deben llevar esa cruz toda la vida.
Si, hace poco hubo un estudio en Alemania sobre el tema... buscad "la importancia de llamarse Kevin" en google... Pero para mi es bastante mas importante que mis Supernenes tienen apellidos netamente españoles y estoy segura de que Charlotte Garcia tiene tambien menos posibilidades en mi pais que Charlotte Meyer. Es decir, no es el nombre, es el puñetero clasismo (que no racismo) que seguimos teniendo y la primera presuncion de que si te llamas Kevin, tus padres son unos tarados fanaticos de "Solo en casa" en lugar de ser dos profesores universitarios irlandeses. Un supersaludo
Una asociasion contra el racismo hizo lo mismo en Francia mandando curriculum con nombres como Mohamed y el mismo curriculum a nombre de François.. adivina lo que pasa...
Un amigo, profesor de secundaria y bachillerato, dice que los Jonathan, Kevin, Joshua, etc, rara vez pasan de secundaria. Evidentemente, estos nombres no los incapacita para estudiar, sino que vienen determinados por un ambiente familiar de bajo nivel educativo y padres poco propensos a educar en el sacrificio y el beneficio de la formación
Pero entonces, lo que usted viene a decir es que el nombre condiciona cómo verán los demás al churumbel, no cómo se sentirá y se verá el propio crío. Quiero decir, que al mocoso se la suda el nombre que le pongan, salvo que sea una payasada que dé lugar a un descojone mayúsculo. El problema radica en la repulsión que ciertos nombres generan en terceros. Un niño llamado Mohamed será considerado en España un "moro de mierda" por aquellos que nunca le han visto. Al final la dichosa sociedad, ese ente amorfo, intangible, pero ubicuo, es quien lo tiene que fastidiar todo con sus prejuicios.
En relación a la nota... En Grecia es lo más normal del mundo que un niño no tenga nombre los primeros meses de su vida. Normalmente, los padres ya saben qué nombre le van a dar (lo más común es poner el nombre de los abuelos, sin más comeduras de coco), pero no se refieren ni se dirigen a él por su nombre hasta que no se le ha bautizado. Hasta entonces, es "el bebé", "la niña", etc. Desde nuestro punto de vista se hace muy raro, pero allí se lleva con una naturalidad absoluta.
Muy buenos algunos comentarios. Me gusta la costumbre Koreana de esperar un tiempito antes de darle nombre al hijo/a hasta ver rasgos de su personalidad (alrededor de un año). Resido en USA y oiga, los afroamericanos le ponen nombres a los hijos, que a veces son impronunciables. Y que me dicen de los nombres de los cubanos y venezolanos de la era "revolucionaria" Sin mas. Feliz Navidad y un mejor 2011
En la religión judía no se puede poner nombre al niño hasta que se le hace el brit milá, a los 8 días.Trae mala suerte pensar en nombre de niños antes que nazcan..me parece muy bien.Todo el mundo me daba el coñazo de porque el niño no tenía nombre todavía :)))))La verdad que en españa podíamos ser un poco más originales y no quedarnos con los nombres que han estado durante siglos..una cosa es tradición otra cosa..es ser pesadoss
cuando estaba embarazada de mi hija teniamos muy claro que era una cristina porque nos gustaba el nombre a su padre y a mi, y cuando el segundo fue niño, tambien teniamos muy claro que era un manuel....lo cierto es que barajamos algunos nombres pero siempre había algo que no echaba para atras...cosas del tipo "alvaro....no, alvaro no, que asi se llama el tio ese tan tonto....virginia...no virginia no que asi se llama mi compañera de curro esa que es una mema" y cosas por el estilo.....hay nombres que simplemente te echan para atras porque lo relacionas con alguien que tiene ese nombre.... Luego esta el caso de mi cuñada...ha querido buscar un nombre tan original y único para sus hijos (niña y niño) que son absolutamente impronunciables hasta por ellos mismos...no digamos ya los abuelos que cuando hablan de sus nietos dicen "la chica o el chico" a veces nos dejamos guiar por modas....y de repente hay una generación entera de alejandros, marias, borjas o kevin....en el colegio de mis hijos solo hay 2 manueles....pero pegas una patada al suelo y en cada clase hay al menos 2 alejandro,2 jorge, alvaros y danieles., montones de paulas, iris y marias....
A mí me pusieron nombre de reina y me ha ido muy bien. Cristina es un nombre interclasista: empezó siendo de clase alta y muy culto, luego pasó a las clases con posibles y hoy sobre todo se usa entre las más humildes. Estoy muy contenta con lo democrático de mi nombre. Por cierto, hubo unos años en que el registro civil en España obligó a que todos los nombres estuvieran en una de las lenguas oficiales de España y corregía cuando a los niños les ponían diminutivos. luego dejaron libertad absoluta en la inscripción. Yo creo que el nombre que te ponen si es significativo e influye en tu comportamiento: efectivamente los hijos de los padres que ni siquiera saben que existe traducción de un nombre extranjero que les gusta o no se molestan en saber qué problemas o ventajas resultan de nombrar así a alguien, tienen peores resultados académicos. yo soy hija de matrimonio mixto y conozco mi nombre y lo uso en los dos idiomas. En francia nunca escribo mi nombre en español y en españa nunca doy la versión francesa, salvo que quiera hacer el gilipollas.
@Fernando: hombre, primero nos cuentas que sigues una tradición judía de tropecientos mil años de antigüedad y a renglón seguido nos animas a ser originales con los nombres y despegarnos de la tradición... ¿Para qué lado tiro, hijo? ;-P
Uf, me ha parecido terrible lo del racismo hasta en los nombres...en fin.El nombre de mis hijos nunca los tuve como favoritos antes de quedarme embarazada, pero durante los embarazos me dio por ellos y fue los que decidimos. http://myhappywindow.blogspot.com/
Por aquí, el sureste, daba igual cómo te llames. Si eras el primogénito eres "el nene" o "la nena", apodo que te puede durar hasta que mueras de viejo, al menos entre la familia. Por otro lado: sería bueno tener en cuenta qué significa un nombre, no para decidir, pero sí para saber.
Buen libro el de Henning Mankell, creo k era el del hombre inquieto.Terrible saber que hasta en los nombres hay racismo, por lo demás muy interesante el blog. Felicidad año a todos
Cuando un@ es maestr@ se va creando a lo largo de su carrera una serie de prejuicios de los que es imposible deshacerse. No voy a concretar por no ofender, pero cuando me quedé embarazada de cada uno de mis dos hijos no tenía nada claro que nombre ponerles, pero tenía perfectamente claro los nombres que NO quería ponerles. Será coincidencia pero hay nombres que parecen condenados a pertenecer a niñ@s especialmente difíciles.
El racismo que deriva de los nombres y/o apellidos me parece fatal, porque al final da la sensación de que si no quieres que el niño se margine tienes que olvidar tus raíces.Sobre el comentario de Montse me recuerda a un capítulo de la serie "cómo conocí a vuestra madre" así que quien vea la serie, pero no siga el ritmo americano, que deje de leer.La cuestión es que unos protagonistas estaban pensando el nombre de su futuro hijo y no podían evitar asociaciones de todo tipo con los alumnos de ella o incluso con strippers!!!
En republica dominicana, igual que en muchos paises de latinoamerica, se buscan nombres insolitos, de conocidos o recien inventados, posiblemente para darle una relevancia a los hijos que, de otra manera, no conseguirian. Muchos de los portadores de tales nombres pasan muchas dificultadades en la vida, una de ellas es la continua erratas al escribir sus nombres en documentos oficiales, errores que les traen muchos problemas.Si vais a mi listados de nombres dominicanos insolitos, podeis ver un enorme listado ( mas de 13 mil ) nombres, muchos de ellos risibles (http://sites.google.com/site/josellibre2/nombresdominicanosinsolitosa
Creo recordar que la tesis de Freakonomics es, precisamente, que el nombre (o cualquier otra cosa que unos bienintencionados padres decidan sobre sus hijos, como a qué colegio llevarlos) no determina el éxito de los mismos, sino que lo que lo determina es quién y cómo son esos padres... no parece que esté muy claro en el texto del post.Por cierto que tampoco he visto a nadie cuestionar cómo se mide ese éxito: estamos hablando de éxito profesional (trabajo, dinero...), personal (salud, familia...), social (educación, no cometer delitos...). Tampoco tiene por qué ser el mismo baremo para todos. Seguro que preguntas a un padre y te dice "yo lo que quiero es que mis hijos sean felices".... :)
La famosa pregunta "¿Y cómo se va a llamar?. A ver, ¡estamos de 3 meses! No sé aún el sexo del bebé, pero mi respuesta, sarcástica y jocosa, es clara: mi niño se llamará Cojoncio. Algunos se quedan estupefactos, a otros les da por reír, otros ponen cara de poker... pero a nosotros nos sirve para que no nos avasallen con el debate absurdo del nombre (todo el mundo tiene derecho a opinar!!). Hasta que nazca será Cojoncín, después... ya veremos.
En el caso de la búsquedad de trabajo, hay que tener en cuenta otra cosa de los USA. El racismo existe, pero para evitarlo está prohibido presentar un CV con foto (como se hace aquí). Así que el racismo se manifiesta en otros términos, en este caso en el nombre... Si un niño negro tiene un nombre típicamente blanco, seguramente conseguirá ser llamado a una primera entrevista más fácil... pero es probable que el racismo surja ahí.Es triste pero es así.
estoy embarazada y he decidido decir basta. Todo el mundo te pregunta que nombre le vas a poner, pero luego opinan y no se cortan un pelo, que es lo que nos ha hecho decidir que no diremos el nombre hasta que nazca. Creo q cuando haya nacido y ya lo tenga puesto se cortarán un poco más. te vuelven loca.
¡Un nombre puede llegar a ser un inconveniente cotidiano, claro que si! Imagínense llamarse Milady (y llegar a un país angloparlante), Yuricel (¡con C, no con S! algo que tienen que ir repitiendo a cada paso), Onedolar (sin comentarios), o el que -creo- es un castigo que no debió imponerse a ningún recien nacido: Lumamijuvisaday...las dos primeras letras de cada día de la semana! Sin lugar a dudas, el que propuso que hubieran nombres momentaneos, que se pudieran cambiar fácilmente con la mayoría de edad, estaba en lo cierto!!! Soy profesor desde hace -al menos- 30 años, y he visto a numerosas personas apenadas con el nombre que alguién le impuso...y eso no está bien, mucho menos en la época de la vida en que los humanos prestamos tanta atención a los detalles que nos representan.
Nosotros tenemos mellizas y cada uno eligió un nombre, siempre y cuando el otro estuviera de acuerdo. Una vez elegidos los nombres tocaba elegir cuál pondríamos a cada una, pensando -como en el fondo pensamos todos- que el nombre marca y que debería tener alguna relación -seguramente imposible de averiguar- con el físico, el carácter, etc. El caso es que decidimos que Itzíar fuera la primera en salir y Teresa, la siguiente. Itzíar es la que se parece más a mí -en el físico y el carácter- y Teresa se parece a su madre. Ella eligió el nombre de Teresa y yo el de Itzíar. Queriendo o sin querer acertamos. Solo tienen dos años y todavía, aunque chapurrean su nombre, no se han quejado sobre si les gusta o no.
En Roma a las niñas no tenían nombre propio oficialmente, solo el apellido o nomen de la familia en femenino y en casa le ponían uno, como un apodo. http://fentdemama.blogspot.com/
De chica odiaba mi nombre, siempre tenía que aclarar Paola, "con o", es italiano igual que mi apellido, y ni hablar de las rimas fáciles... Hasta que de adolescente, comprendí que el nombre y la personalidad se amalgaman, y que era una cuestión de carácter, no de nombre. Por eso mucha gente, cuando piensa un nombre, lo descarta inmediatamente si le recuerda a alguien que no le cae bien.Cuando supe que estaba embarazada, el nombre de mi bebé fue mi primera obsesión, y como me encontraba atascada en el tema, mi marido decidió por mi. Mi hija se llama Mar, y me encanta su nombre, y es adecuado a su personalidad, o al revés!!
Tengo dos hijas, la mayor se llama Marina y le menor Irene, y trabajo en un Registro Civil, y tela marinera. Hace años, Melodys a mogollón, Demelsas, Aroas; o nombres de la novela que en el momento se pusiera. Hubo una persona que quiso ponerle al niño McGiver; y logré convencerle para que le pusiera otro nombre , y al final le puso MIkel, MIguel en vasco. En fin, lo de los nombres va en modas, depende mucho tambien de la cultura y estatus que tengan los progenitores. Un saludo cordial.
Soy Genuterio de la Minglanilla. Llevo toda la vida buscando al mamón que me puso el nombre para matarlo.
En Colombia pasa algo similar a lo de los nombres de negros en EEUU: las clases altas o educadas (no siempre son los mismos) prefieren los nombres de origen español. En el resto de la población los nombres de clara influencia angloparlante o híbrida tienen mucho peso, como en el más colombiano de todos los nombres, John Jairo.En el mundo laboral, no hay cómo negarlo, el nombre es una más de las variables que se usan para la discriminación (aquí la llaman selección de personal). Ferney, Neider, Mayerli, Damaris, etc, por más calificados que sean, no son competencia para Juan, Ana, Rosa, Rodrigo, Pedro, Sofía, etc.
Claro que condiciona el nombre, y mucho. ¿Se imaginan a alguien de éxito que se llame Romualda o Eustaquio? Cuando supe que iba a tener una hija tardamos mucho en encontrar un nombre que nos gustase a los dos. Al final, nos quedamos con un nombre tradicional, que no se suela acortar, y rotundo: Rocío. Y aborrezco los nombres "americanos": Kevin, Jessica, etc. Ya no digamos aquéllos que tienen traducción al castellano y aún así se ponen en inglés. Saludos a todos.
Detrás de cada nombre hay una historia, es eso lo que influye en la vida de quien lleva el nombre y no el nombre en si mismo. Cuando uno escucha una palabra esta lleva un significado que no será el misma para cada uno. Si un negro en USA le pone a su hijo Martin o Malcom, seguramente este nombre estará asociado a personajes que fueron fundamentales para la historia de los derechos de la población negra, quiza no sepan a profundidad la historia, quiza sea porque sus padres admiraban a esos personajes. Creo que es más probable que sean las historias, el significado oculto del nombre, lo que lleve a que uno elija un nombre u otro. La discriminación existe más allá de estos, se puede discriminar por el sexo, por la raza, por la edad o por nacionalidad, supongo que el nombre es una variable más que orienta, pero lo mismo pasa por ejemplo entre una Emily y un Kevin, ¿quién tiene más probabilidad de conseguir el puesto?
Me parece muy interesante esta entrada. Personalmente trabajo con niños y niñas adoptados y la importancia de respetar el nombre que en su momento sus padres biológicos escogieron para el bebé es fundamental para respetar la identidad y los orígenes de este niño/a.Gracias y felicitaciones!!www.postadopcio.blogspot.com
En Francia, en los setenta y ochenta, durante las primeras olas de inmigrantes magrebíes, estos buscaban la integración de sus niños eligiendo nombres del santoral francés. Cuando nacía un niño, se miraba el calendario, y entre los posibles se elegía el que más gustaba. Debido a esto, existe toda una generación de magrebíes llamados Fêtnat, porque nacieron el 14 de julio, marcado en el calendario como Fêt. Nat.: Fête Nationale :)
Paloma, quiero hacer una puntualización a lo que comentas: Mi hija nació hace casi 7 años y me hace gracia lo que comentas de los nombres de "novelas". Escogí Aroa (nombre) por el significado germano del mismo "buena persona", es un nombre suave y elegante. Yo no he visto ni novela ni folletin donde se use. Después he visto que en el Pais Vasco es abundante (alli significa blanca belleza ) y gente incluso que le atribuye raices maories (allí significa Amor) siendo su onomastica el 5 de Julio. Al parecer también hay una virgen con ese nombre. Lo que me hace gracia son los nombre típicos por regiones, en Murcia dices en voz alta !Antonio¡ y el 80% de todos los varones se giran a responderte XD
Errata, para buscar referencias el economista que menionas es Roland J Fryer.
Un nombre tiene que significar algo para la persona que lo pone. Así, cobran sentido los nombres y las personas. El nombre se puede poner por cualquier causa: por ser el nombre del padre, del escritor preferido, el nombre más bonito del que nunca hemos odio hablar, etc... el nombre es una elección personal de quienes tienen que tomar la decisión.
yo vivo en estados unidos y me parece una tonteria que los negros tengan que inventarse nombres para sentirse diferentes....luego dicen que hay racisto o clasismo o lo que sea....muchas veces son ellos mismos los que crean una separacion. si tengo gusta un nombre de"blanco" po se lo pones a tu hijo o no no q es de blanco....vi el otro dia un negro en la tele que se llamaba Tonto...si tonto que bien.
Es sobrecogedor ver la falta de perspectiva de muchos padres a la hora de elegir nombres, guiandose únicamente por su sonoridad y sin importarle que van a ser la "marca" personal de sus hijos para toda la vida. Todo el mundo hace un "pre-juicio" al escuchar un nombre, y ha de tomarse en cuenta. Cuando bauticé a mi hijo mayor, una pareja latinoamericana junto a nosotros le puso al niño (y estoy hablando de Madrid), el nombre de Jordi Franklin (insisto, en Madrid). Con los problemas que tiene uno en la vida, tener que llevar esa losa para siempre, con lo poco que costaría llamarlo Carlos o Juan. Creo que siempre, a la hora de poner un nombre, nos tendríamos que plantear si nos podemos imaginar, en ese país y tiempo, a un presidente del gobierno con ese nombre, así de simple.
Muy interesante el post. Pero echo en falta, en relación con este tema de los nombres, la costumbre de llamar a los hijos con el nombre de los padres, (conozco auténticas sagas de "Pepes", "Pacos", "Manolos", ...).Yo era totalmente contrario a que un hijo mio se llamara como yo, no tanto por el tema práctico de oír "¡¡Carlos!!" en casa y no saber si hablan contigo o no, sino porque lo veo como coartar la personalidad del niño. Parecerá una chorrada, pero el tener un nombre propio, único, (en el ambiente familiar, se entiende), supone una diferenciación y por lo tanto una afirmación de la propia personalidad.Como habréis podido suponer, mi segundo hijo, (los dos son niños), se llama como yo, solo pude resistir el "primer embite" de mi mujer.Otro tema es el de los nombre compuestos, ¿que sentido tiene tener tres, cuatro y hasta cinco nombres?.Salud y prospero 2011.
Como mi marido no es español hicimos lista de nombres que nos gustaban en los dos idiomas para ver cuales podían pronunciarse por las dos familias sin dificultad y así lo elegimos.
pues ustedes no han oido nada, vengan a canarias y pasen a la puerta de un colegio o instituto para que no se enteren de nada, aquí hay dos o tres generaciones de: Jonay,Yaiza,Guacimara, Bentor,Yerai,Gara, Chaxiraxi, Abenahuara, Adexe, Ancor, Ruyman, Rayko....para el que no lo sepa son nombres de prosedencia guanche, hasta ahí todo bien , la cosa cambia cuando van precedidos o acompañados de nombres varios del panorama mundial, por ejemplo Jesús Yerai, Carmen Yaiza, José Ancor, Candelaria Yurena, Julio Ruyman.......sin comentarios. Y cuando son nombre extranjeros: Kevin en todas sus variaciones y mezclas, por ejemplo, Kevin Jesús, Antonio Kevin , Kevin Cosner............Ahora desde hace mas o menos 10 años se ha vuelto a la "normalidad" Antonio, Carlos , Juan , Miguel....Mis hijos tienen 17 y 11 años sus nombres: Fabio y Diego .Ah y yo Ana Margarita y mi madre Eulogia, pero lo de mi madre es otro comentario aparte.
A ver, Cristina/Christine: si tu padre o madre de procedencia francesa te llama Pierre o Marie, asunto de qué les vas a decir a los españoles que te llamas Pedro o María. Pierre es Pierre y Pedro, Pedro: no es el mismo nombre, por mucho que signifique lo mismo! No hay cosa peor que traducirte el nombre, aunque lo hayamos hecho tradicionalmente para personajes de relevancia política, monárquica, social, etc. como el Príncipe Carlos de Inglaterra (consultar Libro de Estilo del País, para ejemplos). Y sin duda, como dice Superwoman, aquí hay clasismo - mezclado con modas - , porque si hay prejuicios contra un Kevin o Conor (sin preguntar si acaso sus padres son anglófonos, o qué más da), no se hace ascos a un Gaëtan, o François, con el que todo el mundo da por hecho que eres francófono y suena fino. Ahora, si te llamas François, así te quedas, no eres Francisco.... Por cierto, me llamo Eva, estudié en un cole inglés y detestaba que pronunciaran mi nombre "Iva", aunque muchos ingleses se esfuerzan y les sale "Eiva". Pero los belgas, franceses o alemanes que conozco me llaman Eva y jamás "Eve", ni "Efa". Claro que este es un nombre fácil. No hay nadie que no hable un francés perfecto que logre pronunciar "Quentin" en francés de manera correcta, que es como se llama mi pareja (ni yo!). Pero nunca se me ocurriría llamarlo Quintín! Saludos.

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Sobre la firma

Yolanda Monge
Desde 1998, ha contado para EL PAÍS, desde la redacción de Internacional en Madrid o sobre el terreno como enviada especial, algunos de los acontecimientos que fueron primera plana en el mundo, ya fuera la guerra de los Balcanes o la invasión norteamericana de Irak, entre otros. En la actualidad, es corresponsal en Washington.

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