Guardias civiles piden la firma de 500.000 ciudadanos para reformar su ley de personal
Las asociaciones mayoritarias del instituto armado presentan en el Congreso una iniciativa legislativa popular para reclamar la modernización del texto actual
En poco más de tres meses, los guardias civiles han sido protagonistas de dos actuaciones inéditas en la historia del instituto armado. Si el pasado 18 de septiembre se manifestaron por primera vez como colectivo -habían participado en actos de protesta pero no en marchas convocadas por sus asociaciones- hoy las dos agrupaciones mayoritarias del cuerpo han presentado en el Congreso de los Diputados una iniciativa legislativa popular para reclamar la reforma de la Ley de Personal del cuerpo, de manera que se conjugue "la naturaleza militar de la Guardia Civil" con los "principios esenciales por los que se rigen el resto de empleados públicos".
"Los ciudadanos tendrán la oportunidad de ver a los guardias civiles en la calle no solo para ayudarles, como es de costumbre" sino para pedir ayuda "con el fin de recabar las 500.000 firmas -tienen un plazo de nueve meses- para la tramitación de la proposición de ley en las Cortes", ha asegurado hoy los portavoces de la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) y la Unión de Oficiales (UO). "Sabemos que contamos con el respaldo de la sociedad, porque la Guardia Civil es un cuerpo bien considerado y la sociedad entiende nuestra propuesta", ha afirmado Francisco García, presidente de la UO.
Según las asociaciones mayoritarias del instituto armado, "los guardias civiles" han decidido "hacer el trabajo que no quiere hacer el Gobierno", que "ha incumplido sus compromisos y obligaciones", establecidas en la disposición final séptima de la Ley 39/2007, al no desarrollar "la Ley Orgánica de Derechos y Deberes" y al no reformar "Ley de Personal".
Las principales demandas que recoge la iniciativa legislativa popular, que hoy han presentado en el Congreso la AUGC y la UO, son las siguientes:
Integración de las escalas de oficiales en una nueva. Su objetivo es conseguir que los agentes "que ingresan en la Guardia Civil desde abajo" tengan la "misma posibilidad real y efectiva de llegar al empleo de general" que los que proceden de la Academia Militar de Zaragoza, que en la actualidad se ven favorecidos. De acuerdo con la propuesta de ley, el primer empleo de la nueva escala de oficiales será el de teniente, de modo que desaparecerá el de alférez, que solo se concederá a los alumnos de forma eventual.
Garantizar el principio de igualdad entre hombres y mujeres. El texto normativo "prevé la realización de evaluaciones periódicas para verificar" la aplicación del "principio de igualdad de género, incidiendo especialmente en la protección durante el embarazo". En la actualidad, las mujeres suponen el 6% de los miembros de la Guardia Civil, una "cifra que se aleja sustancialmente de la paridad", protestan los portavoces de la AUGC y de la UO.
Enseñanza. El instituto armado deberá adaptar la enseñanza "al proceso de conformación del espacio europeo de educación superior". Los nuevos oficiales deberán obtener el título de grado. Además, de acuerdo con la propuesta de ley se "autoriza la creación del centro universitario de la Guardia Civil, adscrito a alguna de las universidades españolas".
Sistema de ascensos. Pierde fuerza la antigüedad a favor del sistema de clasificación, que "valorará fundamentalmente mérito, aptitudes y desempeño profesional.
Sistema de retribuciones. La AUGC y la UO reclaman en el texto normativo la "equivalencia de la escala de cabos y guardias, a efectos económicos, al grupo B de los funcionarios de las Administraciones Públicas". Las asociaciones mayoritarias del instituto armado proponen, "a tenor de la realidad socio-económica actual", que esta equiparación no suponga un "aumento del gasto público durante el periodo presupuestario siguiente a la entrada en vigor de la ley, compensándose mediante la minoración de otros complementos". "No supone una mejora a corto plazo, sino el reconocimiento de la sociedad a la labor de los guardias civiles", aseguran las asociaciones.
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