El presunto asesino de Ana Niculai la mató con una inyección de heroína
El Enano pretendía robar el coche de la mujer rumana para ir a comprar droga
El presunto asesino de la mujer rumana que murió el pasado día 19 y que fue hallada en el maletero de su coche calcinado confesó anoche a la Guardia Civil que lo hizo con una inyección de heroína para robar el coche de Ana Niculai y utilizarlo para acudir al poblado de Son Banya a comprar droga. Alejandro de Abarca, El Enano, fue detenido siete días después.
Abarca, que hoy declara ante la juez que instruye el caso, aseguró en su declaración ante los agentes que el robo se le fue de las manos y que decidió quemar el coche para borrar las posibles huellas que hubiera dejado, según ha informado el abogado de la familia de la mujer asesinada, Antonio Monserrat.
El Enano -le apodan así por su 1,50 de estatura- fue detenido gracias a la colaboración ciudadana. La tarde del domingo fue visto cerca de Búger por un vecino y el cerco de las fuerzas de seguridad se concentró en los pueblos del alrededor. Una hora después de salir el sol fue localizado y detenido en una zona boscosa, cerca de la depuradora de Selva. Veinte unidades de la Guardia Civil peinaron durante toda la noche la comarca tras la alerta recibida.
