La reunión de trabajadores y empresa de Metro de Madrid termina sin acuerdo
La jornada de huelga de hoy transcurre con normalidad, con el 50% del servicio funcionando
La reunión entre los trabajadores de Metro de Madrid y la dirección de la empresa que ha tenido lugar esta mañana ha concluido sin acuerdo una vez más. Después de hora y media de debate, que ha comenzado con retraso, la propuesta presentada por los trabajadores -recortar salarios según la antigüedad de los empleados- no ha convencido a la compañía, que insiste en bajar, de manera generalizada, un 1,5% de los salarios. Los trabajadores insisten en que la Comunidad de Madrid se salta la ley, con su medida de bajar los salarios, porque tienen un convenio vigente que no pueden ignorar. La empresa se mantiene en su decisión y alega que es imposible negociar con los trabajadores.
La Comunidad de Madrid decidió este mes rebajar los salarios a los trabajadores de la empresa, empleados de una empresa pública pero no funcionarios, un 5%, lo que provocó la huelga. Ahora, en un intento de alcanzar un acuerdo que termine con los paros, la dirección ha rebajado sus pretensiones al 1,5% de bajada de salarios, y recortes en otras partidas de gastos de personal que no estén relacionadas con el salario. Los trabajadores amenazan con tomar medidas drásticas y se reunirán hoy. "Los ánimos están muy calientes", afirma uno de ellos. El Gerente del Consorcio de Transportes, J. M. Pradillo: "La negociación se romperá si no respetan los servicios mínimos"
La nueva jornada de paros de los trabajadores de Metro de Madrid ha arrancado con relativa normalidad. Los servicios mínimos, establecidos por la empresa en el 50%, han provocado algunas aglomeraciones en hora punta en las estaciones y líneas más utilizadas.
La jornada de paros de hoy fue decidida en asamblea el pasado lunes. Metro debe ahorrar 7,9 millones de euros para cumplir con los recortes exigidos por Aguirre, y los sindicatos tratan de que no salgan de sus salarios. Con las últimas negociaciones lograron ahorrar 4,5 millones de euros, pero Metro exige reducir un 1,5% de los salarios. El comité de huelga se niega. Además de los paros de hoy, han aprobado una nueva jornada de huelga el próximo viernes. El lunes votarán si también van a la huelga el 20 y el 23 de julio.
Los autobuses de la EMT están funcionando como un día normal de verano (eso quiere decir que utiliza el 85% de su flota). "Sin incidentes, sin aglomeraciones, sin problemas. Hay absoluta normalidad en todas las líneas de autobús", asegura un portavoz. Por otro lado, el tráfico en la capital ha aumentado, aunque con moderación, según informa el Ayuntamiento. Durante las horas punta de la mañana la circulación llegó a aumentar en la almendra central hasta un 12% más de lo habitual (entre las seis y las siete de la mañana). La siguiente hora se redujo un 7%. En la M-30, la circulación llegó a aumentar hasta un 9% por encima de sus valores habituales en ese mismo intervalo horario, y un 4% entre las siete y las ocho. El tráfico no ha sido complicado el resto de la mañana, y ha mejorado desde las ocho, según el Consistorio.
Los taxistas no han notado un aumento relevante de trabajo. "A primera hora un poco más, quizás. Pero esto está como todos los días", dice José Luis a bordo de su taxi en el paseo de la Castellana.
Algunos andenes en la estación de Metro de Nuevos Ministerios, como el de la L8, están llenos. "Pero esto es lo normal en hora punta", indica un habitual, "Quizás un poquito más de lo de el resto de los días. Pero nada más", concluye. El tiempo de espera de los trenes no supera los cinco minutos (un día normal es de entre dos y cuatro y medio). La línea 6 -circular- funciona con rapidez. La frase más escuchada: "llego un pelín tarde". Entre las 10:00 y las 14:00 todas las líneas de Metro funcionarán con unos intervalos de llegada de trenes de entre 9 y 12 minutos, dependiendo de cada línea, según lo previsto por la compañía.
Los servicios mínimos que han impuesto a Metro (50%) provocan que la huelga se quede en una alteración ridícula del tráfico del suburbano. No hay embotellamientos de viajeros (más allá de los de un día normal). Las esperas son cortas. Algunos ni siquiera saben que hay huelga.
La jornada comenzó a las siete de la mañana, con una arenga de los líderes sindicales en las cocheras de Canillejas. Instaban a sus compañeros a salir repartir los panfletos informativos en los que explican a los usuarios los motivos de la huelga. Les recordaban que el viernes volverán a montar el operativo. Los piquetes repartían panfletos informativos porque consideran que la mayoría de los medios de comunicación "informan incorrectamente de sus reivindicaciones". "Ánimo compañeros. Tenemos que seguir luchando", dice un sindicalista. "Esperamos poco de la reunión de hoy".
