El Supremo ordena redactar una nueva sentencia sobre la agresión de tres 'mossos' a un detenido

El Tribunal Supremo (TS) ha anulado la sentencia que condenó a tres agentes de los Mossos d'Esquadra por lesionar a un detenido en la comisaría de Les Corts. La sala de lo penal del alto tribunal ha ordenado que la Audiencia de Barcelona redacte una nueva sentencia "que permita una convicción racional sobre lo probado". El episodio, en el que Rubén Pérez fue golpeado por diversos agentes, fue grabado por una cámara oculta instalada por el Departamento de Interior ante los presuntos casos de malos tratos policiales.

La Audiencia concluyó que los agentes actuaron en legítima defensa tras ser atacados por el detenido, lo que, a juicio del TS, "supone una arbitrariedad" y "contradice la lógica de la realidad documentada". Según el alto tribunal, la contradicción es evidente porque la Audiencia "expresa que del visionado del vídeo la agresión por los funcionarios parece evidente".

En su día, la Audiencia condenó a tres mossos a pagar una multa de 600 euros cada uno por una falta de lesiones y a indemnizar a Pérez con 1.610 euros. Los agentes quedaron absueltos, sin embargo, de los delitos contra la integridad moral, torturas y falsedad documental. La Fiscalía y la entidad Acción de los cristianos para la abolición de la tortura (Acat) interpusieron un recurso de casación que ahora ha sido estimado por el TS.

En marzo de 2007, la sospecha de que en la comisaría central de Barcelona, la de Les Corts, se estaban produciendo abusos policiales, impulsó al Departamento de Interior a instalar cámaras ocultas en la sala de cacheos. Las grabaciones pusieron de manifiesto diversos presuntos casos de abusos. El de Rubén Pérez fue el primero que llegó a los tribunales y causó una gran polémica. Los sindicatos policiales criticaron la iniciativa de Interior y celebraron la sentencia de la Audiencia, ya que inicialmente los agentes se enfrentaban a una pena de cinco años y nueve meses de cárcel.