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Homenaje a Pablo Iglesias en el 84 aniversario de su muerte

Los representantes del PSOE y de UGT aprovechan para hablar de la crisis en la reunión en recuerdo de su fundador

En un rincón estaba sentado Ángel Martínez. En "el rincón de todos los años". Tiene 86 y lleva muchos acudiendo al homenaje a Pablo Iglesias, fundador del PSOE y de UGT. Este mediodía se conmemoraba el 84 aniversario de su muerte. "Con Franco no podíamos estar, así que entonces sólo nos paseábamos", apuntaba. Su rincón está justo detrás del escenario para la foto oficial. Para ella posaban el secretario general de UGT, Cándido Méndez; la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín; el secretario general del PSM, Tomás Gómez; el portavoz socialista en el Ayuntamiento de la capital, David Lucas; y el secretario general de UGT-Madrid, José Martínez. El octogenario ha aprovechado para darle la mano a Cándido Méndez: "¡que tengamos suerte!", le ha dicho.

Los líderes socialistas y sindicales han aprovechado el acto festivo de esta mañana, en el que se ha reunido varias decenas de personas en el cementerio Civil de Madrid, donde está enterrado el padre del socialismo, para hablar de la crisis. "Estamos en plena recesión y observaréis que algunas cosas no han cambiado", ha exhortado Méndez. "Los que han provocado la crisis han pasado de echarse las manos a la cabeza a echarlas al bolsillo de los contribuyentes".

De Pablo Iglesias se ha recordado su larga lucha por derechos de los trabajadores, como la jornada de ocho horas o la igualdad de oportunidades. "Aunque son centenarias algunas de sus conquistas", ha apuntado Pajín, "no hay que perder de vista que todavía hoy no siempre se respetan". "La confrontación partidista", ha añadido, a vueltas con la crisis, "no saca a nadie del paro ni crea riqueza".

Tras sus discursos, el de Tomás Gómez y el de José Martínez, el acto se ha cerrado cantando La Internacional. Los representantes políticos preferían no levantar el puño, como sí lo han hecho muchos asistentes. Pajín se ha animado en la última estrofa. "Luego tendrás algunas críticas, pero para eso estás", le ha soltado uno de los asistentes, Fernando López, con una sonrisa. Los 30 que venían de fuera, desde Zaragoza, han vuelto al autobús poco después de la una. Regresarán, cuentan, para la manifestación que los sindicatos han convocado el sábado.

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