Archivado el 'caso Vilaró' al no poderse identificar al 'mosso' d'Esquadra que le hirió

Carpetazo judicial al caso Vilaró. El Juzgado de Instrucción 28 de Barcelona ha archivado las diligencias abiertas para investigar las lesiones sufridas la madrugada del 30 de junio de 2008 por el intendente mayor de la Guardia Urbana, Xavier Vilaró, al considerar que es imposible identificar al mosso d'esquadra que se las produjo por el lanzamiento de una pelota de goma. La magistrada considera que durante estos meses de investigación no se ha podio aclarar si el impacto que recibió Vilaró fue directo o de rebote de una pelota de goma, ni cuántos rebotes se produjeron por las 88 pelotas lanzadas. También recuerda que no se ha podido precisar tampoco en qué lugar de la plaza de España se encontraba Vilaró aquella noche, cuando se produjeron unos altercados muy violentos por parte de 4.000 personas tras la victoria de España en la Eurocopa de fútbol.

"No es posible determinar la autoría de las lesiones" ni tampoco la "mecánica lesiona denunciada por Vilaró", concluye la juez, quien recuerda que aquella noche intervinieron 10 escopeteros de los Mossos d'Esquadra. Si no hubiera apreciado la existencia de delito, la juez hubiera acordado el sobreseimiento libre, como recuerda en el auto de archivo.

La decisión judicial está fechada el pasado 5 de junio y fue notificada ayer a las partes. Jordi Pina, abogado de Xavier Vilaró, aseguró que no la recurriría ante la Audiencia de Barcelona, "porque deja a salvo la honorabilidad del jefe de la Guardia Urbana". El auto de archivo cierra el último episodio de desencuentro entre ambos cuerpos policiales, después de que la policía autonómica entregase la semana pasada un informe a la juez en el que acusaba a Vilaró de mentir por asegurar que las lesiones se las produjo el impacto de una pelota de goma. La juez rebate los argumentos de ese informe, en el que también se aporta una prueba balística, al recordar que si no se ha podido concretar dónde estaba Vilaró cuando fue alcanzado por la pelota de goma, no se puede especular sobre cómo debería haber quedado la ropa que llevaba tras el impacto.

También se desestima el argumento de que, como Vilaró no dijo que recibió el impacto a los mandos de los Mossos aquella noche, éste no se produjo. "Que no dijera nada, no quiere decir que no existiera", concluye la juez, que en otro momento desestima la petición que hizo la defensa de Vilaró para que se devolviera ese informe a los Mossos al considerarlo "corporativo e insultante".