IU teme filtraciones cenizas de Valdemingómez al Manzanares

La portavoz de Medio Ambiente de IU, Raquel López, ha advertido hoy del "riesgo de filtraciones de cenizas", en concreto de lixiviados, a un acuífero que desemboca en el Manzanares a causa de la "escasa distancia que hay entre éste y la superficie del cementerio de cenizas" de la planta de tratamiento de residuos. En este lugar se entierran 29.000 toneladas de cenizas al año. Sus responsables han subrayado que la incineradora "no representa riesgo alguno".

"En concreto", detalla la concejala, "hablamos de tan sólo 14 metros, hablamos de la necesidad de recubrir con una capa de arcilla el fondo para evitar mayores riesgos y hablamos de que, para unas tareas tan importantes para la salud de los vecinos de la zona, sólo haya asignada una persona en esta instalación".

Este riesgo de filtraciones, sumado al que supone para la atmósfera la propia incineración, está contenido en la exposición de motivos de las alegaciones presentadas por el Grupo Municipal de IU a la solicitud para renovar la autorización ambiental que precisa el cementerio de cenizas.

La coalición pide su cierre

López exige el "cierre de la planta de Valdemingómez, la puesta en marcha de una política integral de tratamientos de residuos sólidos urbanos sustentada en la recogida selectiva, el reciclaje y la reutilización y la elaboración de un estudio de impacto ambiental y sobre la salud del conjunto de las instalaciones potencialmente peligrosas para los vecinos".

Desde el Parque Tecnológico de Valdemingómez, ha respondido a las críticas de IU su directora, Miriam Sánchez, quien ha asegurado la incineradora de este centro "no representa ningún riesgo" para el Medio Ambiente "ni por su forma de construirse ni de gestionarse ni de monitorizarse". El cementerio de cenizas tiene "una red de control tanto interna como externa" por si se produjera "algún fallo" y posee "una estructura con una impermeabilización muy fuerte", ha indicado Sánchez.

"López no está muy informada sobre las vicisitudes del vertedero y le faltan datos fiables", ha agregado la directora del parque empresarial, quien ha explicado que la declaración de impacto ambiental llevada a cabo antes de la construcción de las instalaciones "obliga a que trimestralmente se lleven a cabo análisis preventivos" que, por el momento, no han revelado ningún fallo. "Además, cada saco de cenizas volantes se recubre con 10 centímetros de arcilla y 20 centímetros de grava", ha concretado Sánchez, lo que en su opinión es "un valor añadido" en materia de seguridad y salud para los ciudadanos.