_
_
_
_
_

El juez deja en libertad con cargos a casi la mitad de los joyeros detenidos en Córdoba

La operación es continuación de otra desarrollada en noviembre con 14 arrestos

Un total de 32 joyeros cordobeses fueron detenidos ayer por agentes de Aduanas y de la Policía Nacional en el marco de una operación contra el fraude fiscal en la compra de oro. La operación se ha desarrollado íntegramente en la capital cordobesa, coordinada por la Agencia Tributaria y dirigida por un juzgado cordobés. Hoy, el juez ha dejado en libertad con cargos a 16 de los detenidos.

Las detenciones se produjeron por orden del Juzgado de Instrucción número 2 como continuación de la Operación Fénix, que en noviembre pasado se saldó con la detención de otros 14 joyeros acusados de fraude fiscal. Las mismas fuentes han precisado que el delito principal que se les imputa es de fraude contra la hacienda pública por el impago del IVA en la compra de oro, aunque también pudiera haber otros delitos contables y de blanqueo de capitales. Según dichas fuentes, entre la mayoría de los arrestados son productores y fabricantes, aunque también hay responsables de pequeñas, medianas y grandes empresas.

A los seis joyeros que quedaron ayer en libertad con cargos se han unido hoy, según fuentes judiciales, otros 10 de los arrestados. A lo largo del fin de semana seguirán declarando el resto de los imputados en esta causa, fabricantes y empresarios del sector de la joyería de Córdoba. Según la Guardia Civil y la Policía Nacional, los detenidos son integrantes de una red que importaba oro de Suiza y ocultaba a los destinatarios de su venta en España, con lo que defraudó 154 millones de euros a Hacienda.

Como consecuencia de la operación se han bloqueado cuentas corrientes en 17 entidades financieras distintas, con un saldo global que supera el millón de euros, y se han requisado 150 inmuebles y fincas, en su mayoría situadas en la provincia de Córdoba. También han sido requisadas propiedades inmobiliarias en las ciudades de Sevilla, Granada, Almería, Málaga, Cáceres y Madrid, además de diez vehículos de lujo.

Los integrantes de la red se dedicaban supuestamente a importar grandes cantidades de oro desde Suiza para venderlo en España, mediante la creación de sociedades instrumentales que ocultaban a los destinatarios del oro y que no declaraban a Hacienda. El objeto de estas operaciones fraudulentas era ocultar a los verdaderos clientes, quienes con el oro comprado "en negro", iniciaban un nuevo proceso de comercialización o fabricación de joyas preciosas, que escapaba al control de la Agencia Tributaria.

La principal sociedad implicada en este cuantioso fraude al erario público es, según la Policía, la mercantil Recuperaciones y Afinaciones S.L., que justificaba sus ventas con estas prácticas delictivas. Esta compañía no tributaba a Hacienda el IVA de las ventas de los productos fabricados, los impuestos sobre la renta de las personas físicas o el impuesto de sociedades en los beneficios obtenidos.

Según ha indicado el subdelegado del Gobierno, Jesús María Ruiz, unos cien agentes han participado en esta operación contra el fraudefiscal y aclaró que la mayoría pertenecen al Cuerpo Nacional de la Policía de Córdoba, pero también han tomado parte miembros de Vigilancia Aduanera y de la Agencia Tributaria. La investigación corre a cargo del Juzgado de Instrucción número 2 de Córdoba como continuación de la Operación Fénix, que en noviembre pasado se saldó con la detención de otros 14 joyeros acusados de fraude fiscal.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_