"No hemos perdido ningún feto"

"No hemos perdido ningún feto". Así de tajante responde la directora médica del hospital de La Paz, Aurora Fernández Pavón, a la familia que denunció ayer al centro hospitalario por el extravío de un feto. Ivanka Cañizares, una madrileña de 23 años, ingresó el 1 de marzo embarazada de ocho meses y una ecografía reveló que el bebé había fallecido. Según la versión de esta mujer, autorizó la necropsia del cuerpo para conocer la causa del fallecimiento y lo "donó" al hospital para su incineración. Sin embargo, días más tarde, cuando se interesó por el resultado de la prueba, La Paz dijo que ignoraba el destino final del feto y que no tenía constancia alguna de la realización de la necropsia.

Sin embargo, Fernández Pavón ha asegurado hoy que saben "perfectamente dónde está y qué ocurrió con el bebé de Ivanka. "Se incineró y tenemos la conformidad firmada de la familia", ha subrayado la responsable médica del centro. Según la versión del hospital, es un caso "documentado" y "tanto la historia como la documentación están en orden, tal cual fue".

El asunto está en manos de la "asesoría jurídica del hospital" y Fernández Pavón espera que la justicia les dé la razón. Según explica La Paz, "los facultativos de ostetricia y el propio jefe de este servicio, Antonio González, hablaron con la familia y les explicaron las posibles causas de la muerte y las anomalías que presentaba el feto" y pensaron "que todo les había quedado claro". Por esta razón, el doctor González "es el primer sorprendido" cuando ha conocido la noticia.

"Mi hija está ahora muy deprimida"

Fernández Pavón no ha aclarado, a pesar de ser preguntada en varias ocasiones por este extremo, si se le practicó o no la necropsia al bebé y se ha limitado a reiterar que "todo está en orden" y que no se ha producido ninguna irregularidad. Según la responsable médica, cuando se produce un caso como éste, se sigue un estricto protocolo de actuación, que pasa por "dar las explicaciones clínicas pertinentes" a la familia, que tiene dos opciones "o bien se hace ella cargo del feto para enterrarlo o lo hace el hospital". En todo caso, "no se trata de una donación en ningún caso", como sostiene la familia, sino de una "autorización" para que La Paz incinere el cadáver.

Sin embargo, la familia de Ivanka sostiene que autorizó la necropsia del cuerpo para conocer la causa del fallecimiento y que lo "donó" al hospital para su incineración. Pero que días después La Paz dijo que no sabía dónde estaba el cadáver y que no tenía constancia de que se le hubiera realizado la necropsia. "Nos dijeron que en un mes nos mandarían el resultado de la necropsia", dijo ayer a este periódico Valentina, madre de la paciente. "Pero no llegó nunca. Mi hija está ahora muy deprimida. Ni siquiera sabe las causas del fallecimiento ni si puede o no tener hijos en el futuro", señaló.

María Antonia Moral, presidenta de la Asociación de Víctimas de Negligencias Médicas, que ofrece apoyo legal a la familia opinó que lo denunciaron "hace más de un mes y no han hecho nada". Según esta asociación, el caso "podría constituir un ilícito penal ya que vulnera lo dispuesto en el Reglamento de Sanidad Mortuoria de la Comunidad de Madrid sobre el destino que debe darse a los restos humanos".